Al reconocer que la labor que realizan en favor de la educación de jóvenes y adultos es un compromiso con sus pueblos, expresan las técnicas que implementan para lograr que cada día más personas mejoren sus niveles educativos.
“Con tal de que nuestra gente aprenda a leer y escribir y sobre todo termine la educación básica, no importa que tengamos que ir a la casa de cada de uno de ellos para ayudarlos, hay que adaptarse a sus tiempos”, así exponen asesoras de San José Cieneguilla.
En esta población enclavada en la Sierra Sur, perteneciente al municipio de San Sebastián Rio Hondo, Miahuatlán, gran parte de la población no ha concluido la educación básica y las personas de la tercera edad no saben leer ni escribir, por lo que el trabajo de las asesoras del IEEA es fundamental para apoyar a este sector de la población, un ejemplo de esto lo brindan Merari Martínez y Antonieta Jesusita Aguilar, quienes realizan una intensa labor para disminuir el rezago educativo.
Merari, es comerciante y acude a los domicilios de las amas de casa y campesinos en los horarios que le solicitan, de acuerdo a los tiempos libres de sus educandos, para resolver las dudas que les surgen y así ellos puedan concluir la primaria o secundaria.
Durante los recorridos que tiene que hacer para ir a las casas de sus educandos, aprovecha para vender fruta y verdura. Relata que es una de las técnicas que ha tenido que utilizar para que la gente siga con sus estudios, ya que si les pone un horario o un lugar fijo la gente argumenta que no pueden asistir por sus ocupaciones laborales.
“Cuando voy a la casa de mis educandos me llevo un poco de mercancía para ofrecerla a las personas que me encuentro en el camino y así aprovechar mi tiempo, como casi siempre ando casa por casa”, comenta la asesora, quien entre sus educandos cuenta a sus familiares, el agente municipal y el comisariado de bienes comunales, quienes estudian para terminar su educación básica.
Así como estas asesoras de la Sierra Sur, en Oaxaca hay cuatro mil 763 personas que se encargan de apoyar a jóvenes y adultos de las comunidades y colonias para que salgan del analfabetismo y concluyan su educación básica; de ellos, más de 700 son asesores bilingües, que trabajan con la población indígena, enseñándoles a leer y escribir en su lengua originaria.
Las asesoras y los asesores son personas de las comunidades, que conocen el contexto físico y social. Se preparan constantemente para ofrecer educación de calidad a sus educandos, ya que mientras dura el proceso educativo, se convierten en guía de las personas que buscan concluir la educación básica.
Por lo anterior, el director general del Instituto Estatal de Educación para Adultos, Rogelio Rodríguez Ruiz, reconoció el esfuerzo que realizan y felicitó a las y los educadores de jóvenes y adultos.
Y dijo: “Ustedes son maestros de vida, que acompañan a los que menos saben, en un proceso de enseñanza que abarca contenidos educativos y al mismo tiempo dan lección de solidaridad y perseverancia, su actividad educativa es clave para que jóvenes y adultos se superen”.
Rodríguez Ruiz expresó que en esta fecha tan significativa (15 de mayo) en que se celebra el día del maestro, el equipo de educadoras y educadores del IEEA debe ser reconocido por la labor tan importante que realizan en favor de la educación.
