Entrelineas

Miguel Ángel Schultz

Alejandra García Morlan diputada por el Partido Acción Nacional (PAN) se había significado por ser parte de la causas de la mujer, ya que ella misma tuvo que defender su triunfo electoral como legisladora, posición arrebatada por el machismo que prevalece en su partido, que se ha significado por una frase que utilizó el ex presidente Vicente Fox del PAN, cuando ocupó el cargo al llamar a las mujeres “lavadoras de dos patas” o lo que ha opinado Diego Fernández Ceballos, que decía que el viejerío debía estar en casa.

Sin embargo, sus posturas políticas e ideológicas de avanzada poco a poco ha renunciado ellas, en sus deseos de ser candidata, del PAN, a presidencia municipal de Oaxaca, que seguramente irá en coalición con el Partido de la Revolución Democrática (PRD). Por lo que se ha transformado en una política sensata, en el confort de su curul se ha empezado a diluir lo que le daba sustento, lo que ella significaba no solo para las mujeres, sino también las aspiraciones democráticas del pueblo de Oaxaca.

Así en los momentos cruciales, que muestran de que consistencia están hechos los y las dirigentes, se amedrentó, dando un giro en sus posiciones libertarias, para secundar los intereses de privilegiados, por ello se pronunció a favor de la construcción del Centro de Convenciones en el Cerro del Fortín, sin importarle que con ello echaba por la borda su principal capital político que era su rebeldía, es decir cómo otras y otros doblo la cerviz, ante el poder del empresario metido a político José Zorrilla de San Martin Diego, con negocios en las maquiladoras de ropa, donde las mujeres son brutalmente explotadas.

Parecería un hecho irrelevante, pero no es así, hace unos días organizó un panel llamado La violencia Política, ¿un asunto de género? Junto con otras mujeres, alguna también institucionales otras no en el Casino del Teatro Alcalá, cometió otro traspié al invitar al consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), José Roberto Ruiz Saldaña, que es acusado de acoso laboral y sexual, por Leyla Guadalupe Acedo Ung, ello propició que un grupo de mujeres, a protestar frente a la entrada del Teatro cuyos gritos se escuchaban en el evento. Finalmente la protesta cesó cuando les informaron que Ruiz Saldaña no estaba presente o se equivocaron y nunca fue invitado, pero de la actitud de Ruiz Saldaña no dijeron nada, a pesar de la ruidosa protesta.

Tampoco ha dicho nada mucho del gran número de mujeres asesinadas 417 de acuerdo al recuento llevada por la organización, Consorcio Para el Dialogo Parlamentario y la Equidad y por el presupuesto ridículo que recibe el Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO), que siendo diputada mucho podría hacer desde la misma cámara para incrementarle los recursos a una instancia fundamental para la causas de las mujeres.

Alejandra García Morlan ha guardado silencio ante hechos que antes denunciaba y era solidaria, por ejemplo no ha dicho ni pio, sobre la conducta de Pedro Ruiz, presidente municipal de Tlacolula de su partido el PAN y que se ha caracterizado por ser un depredador contumaz del medio ambiente y también un misógino redomado, que ha llegado a los excesos de filtrar fotografías de una funcionaria del municipio, desnuda que le fueron robadas de una memoria USB, por lo que tuvo que renunciar a su cargo como el edil se lo exigía.

La diputada también había exigido cuentas claras en la 62 legislatura estatal, donde el ejercicio presupuestal es descuartizado como res y repartido como botín; reclamo que también ha dejado en el olvido. Dentro de su partido se inclinó por el candidato rebelde a la presidencia de su comité ejecutivo, el senador Javier Corral, retando con ello el orden establecido del blaquiazul, pero esa postura resultó que ha sido también cosmético ya que empieza a utilizar el método del bateo, o el llamado de la negra que dice sí, pero no dice cuándo, es decir ya aprendió los oficios de la buena política.

Este giro que ha dado hacia la derecha, dentro de la derecha, la aleja de su propósito de conseguir la candidatura a la presencia municipal de Oaxaca, por equidad de género, primero porque hay otras mujeres con esa misma aspiración que no han dado bandazos; segundo porque al dejar su propuesta política sólo es una más de la que quieren estar sentada al lado de la silla, dónde alguna vez se sentó, ese sí el libertario generalísimo José María Morelos Pavón, presidiendo la comuna de Oaxaca de Juárez.  Esperemos que por su juventud e inteligencia Alejandra García Morlan, haga un alto en el camino y retome la ruta que le ha traído frutos a ella y abierto espacios a las mujeres y con ello a nosotros, los hombres.

@MiguelAschulz