Entrelíneas
Miguel Ángel Schultz
El relevo de gobernador en Oaxaca es demasiado largo, de la fecha de la elección al momento de la toma de protesta de quien resultó electo, transcurren 178 días, prácticamente medio año, lo que crea un vacío de poder como se vive en Oaxaca, donde se han disparado los índice de inseguridad, violencia política, criminal e incluso la paralización de la administración pública, entre otros efectos, por decir lo menos de un gobierno que parece zombi.
A Oaxaca le urge una reforma política, que acorte estos tiempos de relevo, a por lo menos 90 días como sucede en el estado de Hidalgo, cuya elección de gobernador se efectuó la misma fecha que la de Oaxaca, el pasado 5 de junio del 2016 y cuya toma de protesta del nuevo gobernador se efectuó el lunes 5 de septiembre, es decir pasaron escasos tres meses.
En Oaxaca siendo el periodo de relevo tan largo se genera un limbo político, al declinar el poder del mandatario en turno, Gabino Cué Monteagudo; sin que las riendas del gobierno las tome Alejandro Murat Hinojosa, gobernador electo, que tomará protesta el próximo 1 de diciembre.
Parece chiste pero no lo es, al contrario el vacío de poder toma visos dramáticos de tal proporción, que hasta los trabajadores al servicio del gobierno no fueron a laborar este miércoles, al no tener el medio de transporte que les proporciona el propio gobierno, para acudir a las llamadas ciudades Administrativa -Tlalixtac de Cabrera- y Judicial -Reyes Mantecón, agencia de San Bartolo Coyotepec-.
La falta colectiva de los burócratas, fue un acuerdo del Comité Ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de los Poderes del Estado e Instituciones Descentralizadas de Carácter Estatal de Oaxaca (STPEIDCEO), ante la suspensión del servicio de transporte por la empresa “Administrador Único de Medina García Transportadora S.A. de C.V.”, por la falta de pago de sus servicios que al año representan 35 millones de pesos.
De inmediato las críticas llovieron sobre los burócratas, al cuestionar su actitud de no presentarse a laborar, cuando cualquier ciudadano y ciudadana que trabaje, es su responsabilidad llegar a su centro de labores, por lo que fueron tachados de privilegiados, flojos y otra sarta de calificativos, cuando se difundió su acto de inconformidad.
Quien en todo caso es responsable de esta situación, grave, es el secretario de Administración, Alberto Vargas Varela, que al no pagar a tiempo a la empresa transportista provocó que dejaran de ir a laborar los burócratas, lo que genera sin duda se atasque la labor gubernamental, cuando esta administración está a escasos 60 días de concluir con su periodo, pero que le importa poco que suceda con la buena marcha de la administración gubernamental.
Sin embargo, las cosas cambian cuando se sabe que el servicio de transporte fue un compromiso del patrón, en este caso el gobierno, que para animar a los burócratas a irse a las ciudades Administrativa y Judicial, que les queda a media hora y una hora de distancia, respectivamente, les otorgó el transporte y fue más allá, les recortó la jornada laboral una hora.
Hay que recordar que los asalariados del gobierno tenían su centro de trabajo en la ciudad de Oaxaca, por lo que para que aceptaran irse -esto ocurrió en el sexenio de Ulises Ruiz Ortiz-, los miles de burócratas adquirieron un derecho y el gobierno una obligación, que hoy al final de este sexenio no puede cumplir, porque se le acabo el dinero.
Esta situación es un claro ejemplo de la forma en que está terminando la administración de Cué Monteagudo, con un gabinete incompleto, sin titulares en las secretarías del Trabajo (Setrao) y Asuntos Indígenas (SAI), así como sin director General del Instituto Oaxaqueño de Atención al Migrante (IOAM), que le renunciaron al considerarlo responsable de la masacre de Nochixtlán, el pasado 19 de junio.
Tampoco ha podido nombrar titular de la Secretaría de Salud, desde el 10 de junio del 2015; como tampoco cuenta con coordinador de Atención a los Derechos Humanos del Poder Ejecutivo y para colmo, tampoco tiene para pagar a sus prestadores de servicios y para lo cual busca -Cué Monteagudo- endeudar a Oaxaca, con otros dos mil 500 millones de pesos, a escasos 60 días de concluir con su mandato.
@MiguelAschulz
