Según la organización civil Puente a la Salud Comunitaria, la “Soberanía Alimentaria” es una opción viable para que el sector indígena y la población necesitada de Oaxaca alcance una solvencia en alimentos para combatir la desnutrición y la hambruna.
Hablar de “Soberanía Alimentaria” es hacer referencia al conjunto de principios que definen el derecho de los pueblos a diseñar sus propios sistemas alimentarios, agrícolas, ganaderos y pesqueros.
Desde 1996 otras organizaciones han tomado la decisión de promover la soberanía alimentaria, en la creencia de que se trata de un enfoque más efectivo para afrontar la crisis internacional alimentaria.
En consecuencia, los grupos interesados en promover la soberanía alimentaria no sólo se limitan al movimiento original, sino que se han expandido internacionalmente. Puente a la Salud Comunitaria es una de estas organizaciones, motivo por el cual los integrantes de esta organización que es encabezada por Katte Saley dicen saber que el consumo y producción de amaranto puede ofrecer a las familias Oaxaqueñas más oportunidades de auto determinación y auto alimentación.
Por lo cual esta organización contribuye a la soberanía alimentaría a través de la promoción, cultivo, consumo y comercialización del amaranto, para mejorar la calidad de vida del medio rural en México.
Dicha soberanía alimentaria se podrá ir dando debido al consumo y producción del amaranto, el cual al mostrar un alto grado de proteínas y vitaminas se convierte en la solución más cercana al problema de la desnutrición. En cuanto al valor nutricional las semillas de amaranto tienen de un 13 a 15 por ciento de proteínas, contenidas entre las cantidades proteínicas más altas de todos los granos.
A decir de los integrantes de esta organización las hojas también son comestibles, contienen más calcio, fósforo, y vitamina C que las espinacas, y además son ricas en fosfato y otros nutrientes presentes en las semillas de arroz, frijol, trigo y sorgo.
En comparación con el arroz, trigo, maíz amarillo y avena, según el Departamento Estadounidense de Agricultura, el amaranto cuenta con más cantidad de fibra dietética, calcio y hierro ya que cuenta por cada 100 gramos de esta semilla la persona estará consumiendo 14.5, 153 y 7,6 gramos de nutrientes respectivamente.
De igual forma cuentan con altas cantidades de potasio, y vitaminas A y C, además, la combinación de amaranto con maíz, el cual es un componente primario de la dieta local, forma una proteína completa.
De acuerdo al Sector Salud las altas cantidades de micro- y macronutrientes en las semillas y en las hojas de amaranto aplicados a la dieta cotidiana ayuda a que los niños superen la desnutrición además de que prevé enfermedades como la gripa y la diarrea.
Amaranto aplicado en Oaxaca
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Nutrición del México Rural, los estados con los niveles más altos de desnutrición son Guerrero, Yucatán, Campeche, Oaxaca, Puebla, y Chiapas, el mismo estudio muestra que, en Oaxaca, el 45.5 por ciento de los niños menores de cinco años en poblaciones rurales de entre 500 y dos mil 500 habitantes está en un estado de nutrición normal (basado en peso por edad).
Mientras que el 31.3 por ciento sufre de la población infantil sufre desnutrición leve, el 18.7 sufre de la desnutrición moderada, y el 4.6 por ciento sufre de la desnutrición severa.
Por lo cual aplicar este alimento en la dieta de los niños oaxaqueños representa para “Puente a la Salud Comunitaria” la manera de ir eliminando a la desnutrición y con ello evitar la muerte de infantes a causa de la pobreza y por ende la falta de alimentos.
Actualmente se han beneficiado a más de 6,000 mujeres y niños de comunidades en Oaxaca para prevenir problemas de salud y malnutrición a través del consumo regular de amaranto, pero se busca que sean cada vez más.
Motivó por el cual luego de conmemorar el día mundial de la alimentación y ver los indicadores tan dramáticos ya que se habla de una crisis por alimentos, los oaxaqueños debemos de considerar agregar esta semilla a nuestra alimentación.
