* GESMujer firma convenio con CECyTEO
Oaxaca de Juárez, Oaxaca.- Invertir en la población de educación media superior es especialmente estratégico, debido al potencial que tienen las mujeres y hombres jóvenes para el desarrollo de Oaxaca, señaló hoy la presidenta del Grupo de estudios sobre la mujer Rosario Castellanos (GESMujer), Angélica Ayala Ortiz.
En el marco del Día Naranja, en el que firmó un convenio de colaboración con el director del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológico del Estado de Oaxaca (CECyTEO), Paula Tapia Palacios, destacó la relevancia de estrechar lazos intersectoriales que permitan fortalecer programas orientados a la promoción de los derechos humanos y la no discriminación entre la comunidad estudiantil.
La fortaleza como GESMujer es colaborar para transformar las situaciones de inequidad que viven las niñas, jóvenes y mujeres, entendiendo la necesaria inclusión de los varones para erradicar los principales problemas que afectan a las niñas y adolescentes oaxaqueñas: los matrimonios infantiles, los embarazos tempranos y forzados y todos los tipos de violencias que enfrentan las mujeres, mencionó.
Por citar algunos datos, Oaxaca ocupa el tercer lugar a nivel nacional en embarazo adolescente y el 68.5 por ciento de las jóvenes indígenas se casan entre los 9 y los 19 años, comparativamente la edad promedio para el matrimonio en la población mexicana es de 21,8 años, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Derechos de las Mujeres Indígenas del 2013.
A nivel mundial la muerte materna, es decir los decesos como resultado de complicaciones durante el embarazo, parto, puerperio y aborto, es la segunda causa de muerte entre las adolescentes de 15 a 19 años (OMS, 2014).
Con respecto a la violencia de género, la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares 2016, el 20.1 por ciento de las mujeres que estudiaban el bachillerato en el año previo al levantamiento, fue víctima de violencia particularmente de tipo sexual. 12 de cada 100 mujeres sufrió abuso, acoso, hostigamiento o intimidación.
Ante este panorama, Ayala Ortiz y Tapia Palacios coincidieron en que la firma de este convenio busca sumar esfuerzos a favor de una cultura de respeto a los derechos humanos y la no discriminación, donde la comunidad docente y estudiantil cuente con herramientas para atender la problemática que afecta principalmente a las adolescentes como son los embarazos tempranos y la violencia de género.