El convoy que lleva víveres al pueblo sitiado, se detuvo en Huajuapan de León, ya que el gobierno estatal les informó que no hay condiciones para su ingreso a la población.
La segunda caravana civil que llevá ayuda humanitaria a San Juan Copala, población rural bloqueada por grupos armados, retrasó hoy su arribo a esa apartada localidad porque no hay condiciones de seguridad adecuadas y se detuvo en Huajuapan de León, informaron fuentes del gobierno del estado de Oaxaca.
El convoy, compuesto por siete autobuses y varios vehículos, partió el lunes de la Ciudad de México con un total de 20 toneladas de víveres e intenta llevar esos suministros a 700 indígenas aislados en la población de San Juan Copala, en el estado de Oaxaca.
Sus habitantes sufren la acción de grupos ilegales armados de la región que les restringen los suministros de comida, energía eléctrica y agua potable.
El gobierno del estado de Oaxaca, que proporcionó unas cuantas patrullas de policía estatal para acompañar al grupo de activistas, comunicó esta mañana a los organizadores de la marcha que no existen las condiciones de seguridad en la zona para que el convoy humanitario ingrese hoy a la población.
Esta es la segunda caravana que busca llegar a la localidad, a la que algunos se refieren como el “Gaza mexicano” , debido a que el pasado 27 de abril el finlandés Jyri Jaakkola y la mexicana Beatriz Alberta Cariño murieron cuando el primer convoy humanitario fue atacado a tiros por desconocidos.
Los activistas planeaban dormir hoy en San Juan Copala, un pueblo en el que habitan indígenas de la etnia triqui, cuyo control se lo disputan las organizaciones Movimiento Unificador de Lucha Triqui Independiente (MULTI) con la Unidad de Bienestar Social de la Región Triqui (UBISORT).
En los municipios “autónomos” como San Juan Copala, las comunidades indígenas eligen a sus autoridades mediante el sistema de usos y costumbres.
A su arribo a Huajuapan de León, la subsecretaria de Derechos Humanos de Oaxaca, Rosario Villalobos Rueda, pidió a los organizadores, entre los que se cuentan unas 30 organizaciones no gubernamentales y diputados del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que “reflexionen” sobre la situación en San Juan Copala.
“Hace falta reflexionar, hay muchas aristas del problema de la zona triqui que requieren estudio y análisis muy concienzudo” , indicó en entrevista.
La funcionaria dijo que aspira a que “al final de la caravana (…) este grupo de personas que viene, los gobiernos federal y estatal y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH)” se puedan sentar a discutir la situación.
Villalobos Rueda manifestó que será en la comunidad de Juxtlahuaca, a unos cuantos kilómetros de San Juan Copala, donde las autoridades definirán “cómo vamos a hacer y quién va a entrar” al pueblo bloqueado, aunque no precisó cuándo podría tener lugar el ingreso a la comunidad indígena.
Según los activistas, el responsable del bloqueo armado es la organización UBISORT, que podría estar aterrorizando a los habitantes de esta localidad sureña del estado de Oaxaca desde que declaró su independencia en 2007, con el supuesto visto bueno del gobierno del estado, que encabeza Ulises Ruiz, del Partido Revolucionario Institucional (PRI) .