La Masacre a los 72 migrantes es una irresponsabilidad del Estado mexicano en materia de derechos humanos
Saltillo, Coahuila a 26 de agosto del 2010
Ante la masacre de cincuenta y cuatro hombres y catorce mujeres migrantes ocurrida en días pasados en el municipio de San Fernando, Tamaulipas, la Casa del Migrante de Saltillo condena abiertamente los hechos sucedidos y manifiesta lo siguiente:
Que éste no es un hecho aislado, sino que corresponde a todo un escenario de persecución y muerte, en el que las personas migrantes sufren la condición de invisibilidad a la que los condena la política migratoria actual. En este sentido:
Reprobamos la declaración del gobierno federal en la que se manifestó que esta masacre corresponde a pugnas libradas entre grupos del crimen organizado.
Condenamos la falta de voluntad del Instituto Nacional de Migración para aceptar la realidad de sistemática violación de derechos humanos de las personas migrantes y decir, como lo ha expresado, que únicamente se han registrado en el año “seis o siete eventos de secuestro”.
Consideramos totalmente insuficientes las palabras de condolencia de la Secretaría de Relaciones Exteriores ante un acontecimiento tan significativo de holocausto contra personas de países latinoamericanos.
Esta masacre es una muestra clara de que la política migratoria actual del Estado mexicano no sólo no garantiza los derechos humanos de las personas migrantes, sino que propicia y permite que se cometan estos delitos, teniendo como consecuencia que esta dolorosa migración de supervivencia deje de tener esperanza y futuro para estos pueblos empobrecidos.
Este acontecimiento no sólo pone en crisis la política migratoria del Estado mexicano, sino que le exige una revisión profunda que la lleve a ser corresponsable con la defensa de los derechos humanos y los compromisos internacionales asumidos por México.
Por otra parte, destacamos que este acto respalda los testimonios de numerosas víctimas, quienes expresan que grupos del crimen organizado reclutan a migrantes con fines de explotación laboral y sexual, así como para utilizarlas en fines ilícitos. Asimismo, es muestra irrefutable de la sistemática violencia ejercida en contra de las y los migrantes sin documentos a lo largo de todo el territorio nacional, vivida con mayor crueldad en la región noreste del país.
En este sentido, en repetidas ocasiones hemos denunciado que Coahuila no está exenta de estos graves hechos. Por lo tanto, hacemos un llamado a las autoridades estatales y municipales para que, de una sola vez, erradiquen todas aquellas condiciones de inseguridad que conllevan a que este tipo de delitos y verdaderas masacres, se cometan en completa impunidad.
Ante la grave problemática, es urgente que el Estado mexicano acepte colaborar con las demandas de los estados centro y sudamericanos, de tal manera que pueda llegar al fondo de las investigaciones y a la justicia y compensación a las innumerables víctimas y a sus familias. Asimismo, es necesario que los gobiernos de Centroamérica fijen una postura concreta de defensa y protección de los derechos humanos de sus connacionales en tránsito por México.
BELÉN, POSADA DEL MIGRANTE
FRONTERA CON JUSTICIA, A. C.
HUMANIDAD SIN FRONTERAS, A. C.
CENTRO DIOCESANO PARA LOS DERECHOS HUMANOS
FRAY JUAN DE LARIOS
DIÓCESIS DE SALTILLO