Oaxaca.- Ricardo López Nava mejor conocido como el “finito López”, en el marco del programa Vive el Centro ofreció ayer una charla en el andador turístico frente a la Catedral de Oaxaca, donde convocó al turismo nacional y extranjero a que visiten el estado de Oaxaca y sean testigos de su gastronomía, tradiciones y costumbres.
La charla que sostuvo con las personas que abarrotaron el andador, fue sumamente emotiva, el mensaje fue claro: cambiar la actitud y mentalidad del mexicano, que generalmente es “cangrejista, incrédula, pusilánime”, y la cual invitó a cambiarla, dejando en claro también que todo puede lograrse, pero con trabajo, con disciplina.
Asimismo, luego de guiar a los asistentes detalle a detalle al momento del inicio de su carrera en el pugilismo, comentó que después de ver una fotografía en el periódico de Rubén Olivares con el campeonato del mundo fue una de las cosas que lo motivó de gran manera para soñar con un título mundial.
“Le dije a mi padre, un día te voy a traer un cinturón de éstos”, a lo que su papá le respondió que mejor se pusiera a hacer algo de quehacer en su casa: “mujer-dijo a su esposa-, pon a hacer algo aquí a esta chamaco”.
Sobre su trayectoria López Nava precisó que una de las palabras que lo llevaron a alcanzar los logros obtenidos en el pugilismo y que sigue aplicando es: “la disciplina, la cual tiene tres vertientes: dedicación, constancia y responsabilidad”.
El debut de Ricardo López como boxeador profesional, fue un 18 de enero de 1985 en Cuernavaca, Morelos y luego su primer campeonato sería en los Guantes de Oro, cuando ganó esa pelea observó su nombre en el periódico compró como 14 ejemplares y los llevó a personas que jamás le habían dado su confianza, incluso a don Liborio, aquel policía del Metro que hasta llegó a mofarse de él cuando el ‘Finito’ llegaba a la estación con sus guantes sobre los hombros para ir al entrenamiento.
Por otra parte hizo un llamado a toda la ciudadanía a que se den la oportunidad de conocer más de lo que es Oaxaca como por ejemplo la Iglesia de la Soledad de la cual es muy devoto este boxeador Mexicano, expresó que ha tenido la oportunidad de conocer completamente la ciudad, ya que hace tiempo radicó en ella, así también expresó su gusto por la comida oaxaqueña, no dejando un lado la gastronomía de los otros 31 estados.
Finalmente expresó que, “Oaxaca es una ciudad de gente buena que no se deja pero sobre todo es muy buena con las demás personas”, dejando en claro el cariño que tiene y ha tenido recíprocamente con los Oaxaqueños.
Les comparto mi poema, . . .
DE COMO NUNCA JAMAS PERDER
Allá, en el reino de Tacubaya,
donde su estrella jamás desmaya,
nació Ricardo “Finito” López,
buscando gloria, dando de golpes.
Los más pensados, selecta esgrima,
los jabs, los uppers, fueron su mina,
sabia defensa, triunfal carrera,
un sólo empate en su friolera.
Chequen los récords, su palmarés,
ni una derrota, ningún revés,
ganar fue siempre su amanecer,
¿cómo es que nunca pudo perder?
El box es fiera guerra de puños,
arte con guantes, fuera rasguños;
“Finito” López, genial esteta,
frágil figura, cuerpo de atleta.
Que fue su templo, bien entrenado,
muy obediente, ¡disciplinado!,
siguió las dietas, formal, estricto,
campeón mundial, retiro invicto.
Gimnasio a diario, como en la escuela;
porqué hacen daño, dejan secuela,
un ¡no a las drogas!, un ¡no al dopaje!,
que eso nos quede de aprendizaje.
Pies bien plantados, guardia derecha,
tiraba el recto como una flecha,
ganchos, cruzados, de noche y día,
Samurais rinden su pleitesía.
El ring, la lona, el encordado,
en la fistiana fue el más amado,
sudor, esfuerzo, bendita esencia,
técnica, orgullo, peleó con ciencia.
Púgil azteca, título paja,
gran minimosca, que no se raja,
fácil doce años, retuvo el trono,
en tal sentido, fue gran patrono.
Toda victoria su autoproclama,
notable ingreso al Salón de Fama,
libra por libra de los mejores,
hay que gritarlo, rendirle honores.
Usó el cerebro más que las manos,
¡que inteligencia!, . . . seres humanos,
mentor excelso, Arturo, “El Cuyo”,
de Magdaleno, su padre, orgullo.
Hijo prodigio, un bien nacido,
por sus amores . . . más que querido,
valora mucho lo que es la vida,
grata entereza en su alma anida.
Véanle la estampa, miren su cara,
como se expresa, su voz es clara,
piensa, medita, muy estudiado,
bueno . . . hasta canta, pues se ha cuidado.
“Colgó los guantes”, la paz, sosiego,
Maclovio amigo, por Lara apego,
“Pobre de mí”, “Garrid”, poesía,
Friedrich Nietzche, filosofía.
De Herman Hesse, “Lobo Estepario”,
trabajar siempre su don primario,
conferencista, cronista a ultranza,
comentarista, . . . punta de lanza.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
México, D. F., a 13 de octubre del 2012.
Dedicado a la Señora Ana María Nava Yáñez de López (QEPD)
Reg. SEP Indautor No. 03-2013-111212464200-14