* “Son condenables y jurídicamente sancionables estos actos”, sostuvo Cuevas Barrón
* “Sorprende la prudente respuesta de nuestro gobierno”
* Anunció que gestionará una reunión de los embajadores de México y EU con integrantes de la Comisión de Relaciones Exteriores para ventilar este tema
México, DF.- Luego de condenar los presuntos actos de espionaje por parte del gobierno de Estados Unidos a ciudadanos y autoridades mexicanas, la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la República, Gabriela Cuevas Barrón, exhortó a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) a emitir un pronunciamiento más enérgico dirigido a las autoridades norteamericanas, a fin de que cesen estas prácticas a todas luces condenables y violatorias de los derechos humanos y de privacidad que deben tener los mexicanos.
En conferencia de prensa, comentó que independientemente de que los estadounidenses argumenten que se trata de “estrategias de inteligencia”, estas acciones de espionaje -sin importar a quién se dirijan- son condenables, inaceptables y jurídicamente sancionables, pues violan leyes mexicanas.
Además, del derecho fundamental que tiene todo ser humano a la vida privada y a la intimidad, valores que están reconocidos en tratados internacionales como la Declaración Universal de los Derechos Humanos (artículo 12), el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (artículos 17 y 19), y la Convención Americana sobre Derechos Humanos (artículos 11 y 13), estos instrumentos establecen que nadie puede ser objeto de injerencias arbitrarias e indiscreciones abusivas en su vida privada.
Es preocupante que -de acuerdo a lo revelado por Edward Snowden- el espionaje se realizó en el año de 2010, en las comunicaciones del entonces presidente Felipe Calderón y se interceptaron más de 85 mil mensajes del presidente Enrique Peña Nieto, en su calidad de candidato. “Lo grave del asunto es que no hemos escuchado de parte de las autoridades norteamericanas que vayan a suspenderlas”, sostuvo Cuevas Barrón.
Ante estos actos dijo, “sorprende la prudente respuesta del gobierno mexicano ante estos actos, pues más allá de solicitar una explicación e investigación contundentes sobre estas operaciones ilegales, nuestro gobierno no garantiza que estas prácticas cesen”.
“En lugar de darle carpetazo a este asunto, México debe recordarle al gobierno estadounidense, que somos socios y vecinos y que entre amigos no debemos espiarnos y que debe prevalecer la confianza y el respeto mutuo”, señaló.
Cuevas Barrón dijo que es necesario que el Senado de la República exhorte a las autoridades a informar cuáles son los avances de las investigaciones que ha iniciado para castigar a los presuntos responsables e imponer las sanciones que correspondan a funcionarios que pudieran haber participado en estos actos ilícitos.
Además, la senadora se dijo preocupada por la posibilidad de que ciudadanos mexicanos puedan ser objeto de actos de espionaje, pues los avisos de privacidad en el envío y recepción de sus correos, no especifica una garantía de que sus comunicaciones no serán intervenidas por el gobierno norteamericano.
Ante este escenario, anunció que la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta que preside, hará las gestiones pertinentes a fin de convocar a una reunión de sus integrantes con el Embajador de México en Estados Unidos y, por separado, con el de ese país en el nuestro, a fin de ventilar este tema y solicitar de manera urgente que cesen estas prácticas violatorias.
“Tanto el titular del Poder Ejecutivo Federal como la Secretaría de Relaciones Exteriores tienen todo el apoyo en las acciones que emprenda, con el propósito de poner fin a este espionaje”, finalizó la Senadora.