México, DF.- En días recientes la opinión pública centró su atención en la enorme discriminación que sufren las familias indígenas, con especial acento en las mujeres, desgraciadamente el motivo ha sido una declaración de la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, que prácticamente fue una subliminal amenaza de excluir del programa “Oportunidades” a aquellas madres que tengan más de tres hijos, señaló la senadora Angélica de la Peña Gómez.
Dijo que los intentos por aclarar, justificar o explicar tal declaración, sólo han servido para mostrar que en esta dependencia, la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), la planificación e implementación de uno de sus principales programas, “Oportunidades”, son discriminatorias, improvisadas y demagógicas.
La senadora del Partido de la Revolución Democrática (PRD) resaltó que también queda al descubierto la ausencia de políticas públicas eficaces de planificación familiar y de generación de empleos dignamente remunerados, y obviamente, de su articulación en una estrategia integral para reducir los altos índices de pobreza en México.
Las cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) señalan que el 45.3 por ciento de los mexicanos viven en la pobreza y uno de cada diez, en pobreza extrema; esta última cifra implica que 11.5 millones de personas en México no tienen los ingresos necesarios para un nivel mínimo de bienestar.
Agregó que la “ligereza” de la declaración de Robles Berlanga es aun más evidente al encontrar que el propio CONEVAL informa que de las personas en pobreza extrema, solamente 50 por ciento recibe apoyos del programa “Oportunidades”; que 72.3 por ciento de la población indígena y más de la mitad de los 40 millones de los mexicanos menores de edad (53.8 por ciento) están en situación de pobreza.
“Este mismo miércoles, un periódico de circulación nacional dio cuenta del fallecimiento de una pequeñita rarámuri, de tan sólo dos años de edad por desnutrición. La menor vivía con sus padres en la comunidad de Baqueachi, municipio de Carichí, Chihuahua. Son 24 municipios rarámuris y sólo tres de ellos entraron al Programa Nacional contra el Hambre: Guachochi, Batopilas y Morelos”, comentó.
La también presidenta de la Segunda Comisión de la Comisión Permanente indicó que se requiere que la SEDESOL evalúe sus objetivos y las reglas de operación de sus programas y, de ser necesario, modificarlos para eliminar todo rasgo de discriminación y respetar la etiquetación que el Congreso ha dado a los recursos autorizados para esta dependencia.
Los senadores del PRD estarán atentos ante una posible comparecencia de Robles Berlanga, que a todas luces es indispensable, mientras tanto recomendó “analizar que no es lo mismo hablar de una mujer que va a la universidad y obtiene un título profesional, como es el caso de la señora titular de SEDESOL, a una mujer indígena que por desgracia no puede ni decidir cuántos hijos quiere tener”, concluyó la legisladora.