Entrelíneas
Miguel Ángel Schultz
El Partido Social Demócrata (PSD) que fundó y dirige Manuel Pérez Morales, ayer reconoció el triunfo de Alejandro Murat Hinojosa, pese a que aún no se ha realizado el cómputo oficial, lo que anticipa políticamente que el candidato del PRI-PVEM-PANAL empieza a legitimarse. Seguramente otros candidatos de los partidos llamados morralla, bonsái o de la chiquillada harán lo propio, lo que da inicio a la ceremonia del poder conocida como el “besa mano” o “a sus órdenes jefe”.
De los partidos con presencia destacada: los de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), de la Revolución Democrática (PRD) y Acción Nacional (PAN) mantienen la postura de no reconocer el triunfo del PRI; Salomón Jara Cruz de Morena asumió la más férrea oposición a reconocer el triunfo electoral del priista, nacido en otras latitudes más no bajo el cielo de Oaxaca, aunque por el derecho de sangre, al ser su padre oaxaqueño, lo es él también.
José Antonio Estefan Garfias de la Coalición con Rumbo y Estabilidad por Oaxaca (CREO) integrada por el PAN-PRD, busca en tribunales echar abajo la victoria electoral de Alejandro Murat, lo que se ve imposible. No sólo por las circunstancias que rodean al proceso, sino también porque su principal asesor legal, el diputado local perredista y licenciado constitucionalista, Jaime Bolaños Cacho, no gana ni una, porque al parecer nunca ha sido abogado postulante, sino teórico del derecho.
El PSD fue fundado en el año 2012, por el maestro y abogado Pérez Morales, quien se ha caracterizado por su formación de izquierda, participando tanto en el Movimiento Democrático de Trabajadores de la Educación (MDTE) como en la Unión Campesina Democrática (UCD), al lado de Salomón Jara, Amador Jara, Rey Morales Sánchez, Flavio Sosa Villavicencio, quienes fueron promotores del PRD, entre otros más. Además de ser diputado por el PRD en la 56 Legislatura local y de la 62 con el PSD.
Sin embargo, el partido de Pérez Morales tiene su orígen en una agrupación llamada “Zayuzentex A.C.”, constituida el 10 de noviembre del año 1997, que pasó a ser a los pocos meses -febrero de 1998- la Organización Estatal de Ciudadanos “Shuta Yoma A.C.”, que derivó en el PSD, por resolución dictada por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en el Expediente número SUP-JDC-1895/2012.
El activo electoral de Pérez Morales es de apenas 24 mil 375 sufragios, que prácticamente lo sitúa en el umbral de la pérdida de su registro, sin embargo hay diversos criterios legales que pueden hacer que lo conserve. Para el Partido Revolucionario Institucional (PRI), es decir para Alejandro Murat, la importancia de este reconocimiento no es cuantitativo, sino cualitativo, porque así va construyendo su legitimidad.
La utilidad que saca Pérez Morales es mantener su capacidad de gestión, por lo que podrá conservar su base social, que volverá a adoptar la figura de asociación civil y tendrá la puerta abierta, con quién seguramente será el gobernador. Beneficio que también buscarán los partidos Unidad Popular (PUP) y Renovación Social (PRS).
Para algunos la postura asumida por Pérez Morales es oportunista y convenenciera, pero más que el calificativo que se le pueda dar, no tenía otra alternativa, como tampoco la tienen Joaquín Ruiz, candidato del PRS, que sumó 20 mil 318 votos; el PUP con Francisco Jiménez Jiménez, por quien votaron 41 mil 573 electores, que seguramente se pondrán a las órdenes del priista.
Todas estas cifras son de acuerdo al Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), por lo que podrían variar algunos dígitos, pero pareciera que los partidos locales están destinados a desaparecer, al no poder conservar sus registros por la poca cantidad de votos obtenidos.
Llama la atención que Pepe Toño, candidato del PRD-PAN, haya contendido contra José Murat Casab por la candidatura del PRI a la gubernatura en 1998 y haya perdido. Historia que se repite 18 años después, por lo que se comprende la postura de no arriar banderas hasta que esta historia termine, con el reconocimiento del triunfo de Alejandro Murat.
Indebidamente el gobernador Gabino Cué, antes de 24 horas de concluido el proceso, declaró que dirigentes de partidos y sus candidatos a cargos de elección popular tenían que reconocer los resultados, dicho en palabras llanas reconoció los resultados del PREP, que anunciaron el triunfo de Alejandro Murat. Es decir se volvió tribunal electoral y calificó la elección, en el mismo sentido de sumarse a la ceremonia del “besa mano” o “a sus órdenes jefe”.
Asimismo esta declaración hace ver que Gabino Cué ha soltado la mano de Estefan Garfias, que si quiere seguir impugnando la elección será una decisión personal, por lo que al retirarle su apoyo, no sólo será político, material y humano, regresar a sus cargos a todos los funcionarios de gobierno, que en mala hora Pepe Toño incorporó a su contienda, lo que sin duda fueron un factor importe para que perdiera.
@MiguelAschulz