“El Dragón” fue considerado hasta minutos antes de la una de la tarde con quince minutos, hora de su muerte, del día de hoy un jefe de jefes de los porros de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO), quien se reivindicaba como un líder estudiantil.
Durante su carrera de “golpeador” universitario contó con la complacencia de las autoridades de la UABJO, por lo que nunca se esclarecieron las balaceras en las que participó.
En contra de él según se sabe las autoridades universitarias iniciaron por lo menos 15 averiguaciones previas, sin que ninguna de ellas prosperara, ante la falta de elementos para integrarlas o por el olvido de las máximas autoridades universitarias, que nunca le dan seguimiento a las denuncias que emprenden.
Rubén Marmolejo se jactaba en vida de haber estado no al servicio de dos rectores, si no compartiendo sus proyectos académicos, al igual que a la mayoría de los directores de diversas facultades y escuelas de la UABJO, pero siempre se cuidó de revelar los nombres de los funcionarios con los que se vinculaba, o les prestaba sus servicios.
Aseguraba, en vida desde luego, que no había la sensibilidad para el diálogo de parte de diferentes actores dentro de la UABJO, por lo que no dejaban otro camino a los “estudiantes” universitarios que expresarse con toda la fuerza de la juventud.
Él mismo aseguraba que desde el año 2008, cuando se retiró de la vida universitaria, la violencia se había agudizado dentro de la Máxima Casa de Estudios, cuyo actual rector Rafael Torres Valdés, está de acuerdo con la tomas de las facultades universitarias como en el caso de Medicina y Cirugía, según lo ha expresado públicamente el rector.
Estudiaba supuestamente en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UABJO, pero nadie sabía a ciencia cierta si esto era verdad o no.
Internamente en la Universidad fue señalado de formar parte de quienes integraron las Caravanas de la Muerte, que se dedicaron a reprimir y provocar la muerte de por lo menos 26 personas durante la revuelta popular del 2006, que pedía la salida del gobernador Ulises Ruiz Ortiz y que fueron coordinadas por el entonces secretario de Gobierno Jorge Franco Vargas.
Dentro de los hechos más destacados en los que se le vincula es el saqueo de Ciudad Universitaria utilizando camiones de mudanza, precisamente un 28 de octubre, es decir de hace un año y un día.
De los personajes que lo protegían se señalaba al actual Secretario General de Gobierno, Evencio Nicolás Martínez Ramírez, entonces Procurador General de Justicia del Estado y maestro de tiempo completo de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UABJO.
De este saqueo el Abogado General de la UABJO, Avelino Vázquez Luis, señaló que el monto de lo robado tenía un valor aproximado de dos millones de pesos e hizo hincapié en ese momento, que desde la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), había un “manto protector” para “El Dragón”.
Su principal contrincante dentro del sector estudiantil de la UABJO fue otro dirigente estudiantil igual que él, y era Mateo Esteva conocido como “El Aladino”, con quien se disputaba las zonas de influencia en la UABJO.
El saqueo cometido impunemente a la UABJO se realizó luego que el rector Rafael Torres Valdez, anunciara en su informe, el 13 de octubre de hace un año, que se había puesto en marcha un ambicioso y contundente sistema de seguridad dentro del campus universitario, el cual contaba no solo con los elementos de la Policía Bancaria del gobierno del Estado, sino también con cámaras que grabarían las 24 horas todas las instalaciones universitarias, pero el día del descomunal robo el sistema se cayó.
De este “megasaqueo” a la UABJO el propio “Dragón” responsabilizó a las mismas autoridades universitarias, que tenían a su cargo el sistema de seguridad apuntando hacia quienes tienen en sus manos ese sistema de seguridad.