* Mediante prevención, debida investigación y sanción, y atención integral a víctimas
* Segunda Asamblea Plenaria Ordinaria de la CONATRIB; Piden a juezas y jueces voluntad política para dar un gran golpe de timón y terminar con dicho flagelo
Guadalajara, Jalisco.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) llamó a los juzgadores del país a comprometerse con la estrategia global de prevención de la tortura, con el fin de reducir el riesgo de ese flagelo, ya que, pese a la condena pública de esa práctica, se recurre a ella en la clandestinidad en muchos países, incluido México.
El presidente de la Comisión Nacional de los Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, señaló que dicho fenómeno persiste en el país, a pesar de que su prohibición está pactada en instrumentos internacionales y contar con una Ley General de avanzada en la materia.
Al dictar la ponencia “Poder Judicial y Mecanismo de Prevención de la Tortura, instancias naturales de colaboración y complementariedad”, dijo que es fundamental sumar acciones preventivas y correctivas sobre la tortura para contribuir a su erradicación, mediante tres vías: prevención; debida investigación y sanción y atención integral a las personas víctimas de tortura.
En el marco de la Segunda Asamblea Plenaria Ordinaria de la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia de los Estados Unidos Mexicanos (CONATRIB), pidió a las juezas y jueces de derechos humanos su voluntad política para dar ese gran golpe de timón que demanda la sociedad mexicana para terminar con la tortura.
Tras destacar el importante papel del Poder Judicial en materia de prevención, les hizo un llamado para adecuar la ley en la materia, de modo que sean compatibles lo que establece la normatividad y las facultades que tienen las juezas y los jueces para sancionar la comisión de actos de tortura, para lo cual deben impulsarse el diálogo y el intercambio de ideas sobre el tema.
Ante Sergio Javier Medina Peñaloza, presidente de la CONATRIB; Ricardo Suro Esteves, presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco; Misha Granados Fernández, consejero Jurídico del Ejecutivo Federal, y Marco Becerril Garcés, secretario Técnico de la CONATRIB, mostró la disposición de la CNDH de sumar esfuerzos con el Poder Judicial para que cada instancia, desde el ámbito de su competencia y atribuciones, contribuya a la prevención y erradicación de la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.
Reseñó las acciones que lleva a cabo el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura y las visitas que realiza a centros penitenciarios y otros lugares de internamiento como albergues públicos y privados, hospitales psiquiátricos y estaciones migratorias.
Subrayó que no debe haber tolerancia hacia la tortura, ni asumirla como inherente a la investigación de los delitos, ni como cultura o forma de justicia arraigada en el país, ya que no hay niveles ni rangos aceptables de la misma, y un solo caso debe movilizarnos para investigar, deslindar responsabilidades, aplicar sanciones que procedan y, sobre todo, prevenir su repetición.
González Pérez hizo especial énfasis a la tortura y malos tratos hacia mujeres durante la detención, lo que ha recibido escasa atención, y precisó que la violencia contra las mujeres privadas de la libertad es preocupante para la CNDH.
Finalizó al proponer que el Poder Judicial y los ombudsperson unan esfuerzos para generar acciones conjuntas tendentes a prevenir la tortura y malos tratos, lo que es un reto monumental, pero no imposible.