Ciudad de México.- La promesa del Gobierno Federal de reducir la violencia y los delitos como principal demanda social, sólo podrá concretarse en tanto, desde la misma administración pública, progresen la aplicación del estado de Derecho, la certeza jurídica y la confianza en las decisiones presidenciales, señaló la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en la Ciudad de México.
Mas, generar certidumbre un día y desconfianza al otro por decisiones tomadas sin ningún rigor, sólo alientan la desesperanza, poco o nada aportan a una gobernabilidad democrática y, sobre todo, la mayor parte de la factura la pagan aquellos miembros de la sociedad que menos tienen.
Coparmex CDMX solicita al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, mantener sus promesas y evitar que, mediante métodos carentes de toda consideración se cancelen obras o proyectos que pueden significar un paso adelante para el bienestar social, como es la construcción de un transporte más eficiente que podría reducir el tiempo de traslado de las personas y disminuir el uso del automóvil o la exploración y explotación de zonas con alta probabilidad de encontrar significativos mantos petroleros.
El pasado 13 de junio, el presidente firmó un acuerdo para promover la inversión y el desarrollo incluyente en cuatro ámbitos económicos estratégicos como son energía, infraestructura de transporte, inversión social (educación, salud, agua, saneamiento), y desarrollo del Sur-Sureste.
El mismo día y con diferencia de horas, la Comisión Nacional de Hidrocarburos canceló las licitaciones o rondas petroleras programadas para octubre, con el fin de que en la explotación de campos petroleros se pudiera asignar a Petróleos Mexicanos (Pemex) socios de la Iniciativa Privada, como fue previsto en la Reforma Energética.
Y 72 horas después, mediante una votación celebrada en un mitin con simpatizantes, a mano alzada, pidió se eligiera el apoyo o cancelación del proyecto de Metrobús en la zona lagunera de Torreón-Gómez Palacio-Lerdo, con una inversión programada de 450 millones de pesos que iba a generar empleos y activación de la economía, además de los beneficios que el sistema Bus Rapid Transit (BRT) incorpora a la vida de los usuarios por su rapidez y comodidad.
De esto último sabe López Obrador, pues cuando gobernó la hoy Ciudad de México generó las condiciones para la construcción de la infraestructura y puesta en funcionamiento del Metrobús de Indios Verdes a Doctor Gálvez.
Es prudente observar que en todos los países donde existe una regulación para la producción y competitividad, donde la Iniciativa Privada es un actor importante, fluye la inversión, la economía es positiva y arrastra mejores condiciones de vida para sus ciudadanos.
El empresario necesita del Gobierno mexicano compromisos que se vean respaldados por acciones en consecuencia, que le permitan resolver dentro de un marco de absoluto respeto al estado de Derecho, aquellos obstáculos que impiden la generación de proyectos de inversión para la creación de empleos dignos y mejores salarios.
Sólo en un marco de colaboración mutua, afinidad en los proyectos, claridad en los mensajes, el cumplimiento de las reglas y estabilidad en el manejo de nuestra economía y finanzas, México y los mexicanos podremos salir adelante porque si le va bien al presidente, nos irá bien a los mexicanos, y si nos va muy bien a los mexicanos, el presidente tendrá un lugar privilegiado en la historia del país.