El funcionario del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca agregó que contrario a lo que se piensa de esta afección, son los adultos jóvenes y no las personas de la tercera edad los más perjudicados.
Considerada una de las principales enfermedades incapacitantes en el IMSS, solo por debajo de la diabetes y algunos tipos de cáncer, la artritis reumatoide afecta en más de un 70 por ciento a personas cuando se encuentran en la edad más productiva y apta para laborar, es decir entre los 30 y 50 años, y solo en un 20 por ciento de los casos se presenta en adultos mayores.
El médico especialista en epidemiología detalló que los principales síntomas de dicha enfermedad son: inflamación y dolor de las articulaciones -principalmente de manos y pies-, enrojecimiento, dificultad de movilidad y rigidez por las mañanas; y que con el paso del tiempo se establecen deformidades, que a nivel radiológico dan lugar a cambios de la estructura ósea y la formación de erosiones con secuelas irreversibles.
A pesar de que la artritis reumatoide aún no tiene cura porque se desconocen sus causas, los médicos aseguran que si se cuenta con un diagnóstico a tiempo y un tratamiento adecuado es posible controlar el rápido avance de la enfermedad y en consecuencia, el paciente puede mantener una buena calidad de vida.
Con los medicamentos actuales se ha cambiado drásticamente el panorama de la enfermedad, llegando a reducir un proceso importante de la inflamación y, sobretodo, permite al paciente continuar con su actividad prácticamente normal, explicó Cerero Gudiño.
Cabe destacar que el 86 por ciento de las atenciones brindadas en el servicio de Reumatología del Hospital General de Zona Número Uno del IMSS corresponden a la artritis reumatoide a pesar de la existencia de más de 200 patologías reumáticas, las cuales se caracterizan por la aparición de cambios, lesiones o alteraciones en uno o varios de los elementos del aparato locomotor, es decir, en los huesos, las articulaciones, los músculos, los tendones y los ligamentos.
