En entrevista sostuvo que estas cifras obedecen al arduo trabajo emprendido por los trabajadores operativos del área de vectores, así como a la participación de la comunidad en las acciones de prevención y control del insecto.
Explicó que esta enfermedad es trasmitida por el mosquito del género “Anopheles” que está infectado por el parásito “Plasmodium” en sus glándulas salivales, al momento de picar al humano es depositado en su cuerpo y migra al hígado, donde se multiplica rápidamente dentro de las células hepáticas.
Barroso Rojas abundó que de enero a la fecha, se han realizado 14 mil 113 tomas de gota gruesa para detectar el paludismo, sin que se haya obtenido ningún resultado positivo de este mal.
En los últimos tres años ha disminuido de manera importante esta enfermedad en la región. En el 2011 se confirmaron 17 casos, en el 2012 se redujeron a ocho y en 2013 un solo caso, por lo que hizo un llamado a la población a no bajar la guardia y seguir colaborando con las actividades que el sector Salud emprende en su beneficio, resaltó.
Luego de destacar que es una prioridad la labor de los “cascos amarillos”, y reconocen el esfuerzo de todos los trabajadores en el combate a los vectores endémicos de la zona, pidió a la población que si presentan los síntomas del paludismo: fiebre de inicio repentino, dolor del cuerpo y malestar general, no automedicarse, y acudir de inmediato a la unidad de salud más cercana para realizarse la prueba de detección e iniciar con el tratamiento.
