* El piso mínimo de garantías lo establece la Constitución Federal, pero la legislación local puede ampliar derechos
Ciudad de México.- La Constitución de la Ciudad de México (CDMX) nos consolida en Latinoamérica como la capital de los derechos y las libertades y seguiremos defendiéndola con toda la solidez jurídica necesaria y el respaldo de la fuerza social progresista, a fin de robustecer y garantizar derechos para toda la población, afirmó Vicente Lopantzi García, consejero Jurídico y de Servicios Legales.
A un año de la publicación del texto constitucional, puntualizó que después de 200 años la Metrópoli demostró que la diversidad política es fundamental en la construcción de acuerdos cuyo propósito es mejorar las condiciones de vida y dar respuesta contundente a las luchas sociales.
Resaltó que el Gobierno de la Ciudad de México trabaja en el objetivo de afianzar la Carta de Derechos de la Constitución local, porque es la “columna vertebral” que expande lo mínimo planteado en la Constitución federal.
“El piso básico de respeto de derechos lo inscribe la Carta Magna y eso lo contemplamos a cabalidad, sin embargo, no significa que mi protección como entidad se reduzca exclusivamente a lo ahí establecido, por ello estamos peleándola con todo”, afirmó Lopantzi García.
El funcionario explicó que si de conformidad con la propia sociedad, es necesario llevar más allá la expansión de algún derecho establecido en el orden federal, nada imposibilita a la legislación local de hacerlo.
Destacó que en sus 71 artículos, la Ley Máxima de la Capital establece derechos fundamentales para los pueblos indígenas y barrios originarios, como parte del consenso entre las fuerzas políticas del Constituyente, la Asamblea Legislativa y especialistas y expertos que intervinieron en su redacción.
El titular de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales enfatizó que el entorno sustentable es un derecho para todos los capitalinos, así como la obligación del gobierno de presentar planes destinados a enfrentar el Cambio Climático.
Subrayó que otros derechos consagrados a favor de la Urbe son los matrimonios entre personas del mismo sexo, la interrupción legal del embarazo, el acceso universal al agua y el libre tránsito de migrantes, entre muchos otros.
“Los dos primeros son temas donde la Constitución guardaba silencio, no hablaba nada del derecho al matrimonio igualitario ni nada sobre la decisión de la mujer, pero la Ciudad decidió hacerlo y ahí está el resultado”, finalizó.