Oaxaca de Juárez, Oaxaca.- Las vacaciones de verano comenzaron, y con ellas los días libres en todos los sentidos. Por lo que en esta época los pequeños del hogar son más propensos a consumir en exceso golosinas, habito que les puede ocasionar problemas desde los dentales hasta el aumento de peso, hipertensión, problemas cardiovasculares o diabetes.

Al respecto, la coordinadora de Nutrición y Dietóloga del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Roció Guadalupe Espinosa Castro, refirió que durante esta época comúnmente los padres suelen ser muy permisibles con las rutinas diarias, desde los horarios de levantarse, dormir e inclusive la hora y que tipo de alimentos ingerir.

Sin embargo, el abuso en el consumo de golosinas trae como consecuencia una intoxicación que pasa desapercibida hasta que nuestros órganos depuradores están colapsados intentando deshacerse de la basura que reciben.

Comenzando así con una falla en nuestro sistema, nuestra sangre se vuelve espesa y ácida y llena de toxinas que intentan salir a través de otros medios, acumulándose en varios tejidos internos o buscando vías nuevas de escape como la piel, los ojos y la boca, etcétera.

De igual forma los azucares que reciben de estos productos, hacen que los pequeños muestren cambios en el estado de ánimo, desde estrés, hiperactividad, ansiedad, hasta tristeza o depresión.

Por ello, exhortó a los papás a procurar no afectar la alimentación de sus hijos durante estas fechas, ya que juega un papel destacado en el desarrollo y crecimiento del menor. Es importante que procuren ciertas acciones para no alterar la rutina que el pequeño adopta durante los días de escuela.

En ese sentido, enfatizó lo importante que es comenzar a educarlos, ofreciéndoles frutas en vez de galletas, preparándoles malteadas de frutas y para la tarde procurar que consuman todas los nutrientes necesarios. Durante este periodo puede preparar botanas con naranjas, pepinos, zanahorias, jícama, para así estimular su gusto por las verduras y por los aperitivos saludables.

Espinosa Castro exhortó a los padres a tratar de mantener los horarios de comida lo más cercano a lo habitual y sobre todo, moderar el consumo de dulces o golosinas de los pequeños, ya que una buena nutrición va a estar siempre ligada a una alimentación balanceada y saludable.