* Este delito provoca desplazamientos forzados, desintegración familiar, orfandad, inseguridad y violencia: Benavides Cobos y Zamora Guzmán
Ciudad de México.- Es urgente que la comunidad internacional ponga especial atención al tráfico ilícito de armas, con el objetivo de garantizar la paz y seguridad internacionales, aseguraron la senadora Gabriela Benavides Cobos y el senador Rogelio Israel Zamora Guzmán.
Por tal motivo, presentaron un Punto de Acuerdo para exhortar a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para que promueva, en la región Latinoamericana y Caribeña, acciones y medidas multilaterales contra el tráfico ilegal de armas convencionales.
Destacaron que aún persisten conflictos armados que ponen en peligro todo tipo de vida en el planeta y llegan a provocar consecuencias psicopatológicas, muertes de civiles, desplazamientos forzados, desintegración familiar, orfandad, inseguridad y violencia.
Aunado a ello, los legisladores del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) señalaron que este delito también afecta el sistema económico, político, social, cultural y hasta del medio ambiente.
Entre el armamento que se trafica, precisaron, se pueden encontrar minas terrestres, municiones, armas pequeñas y ligeras, y hasta sistemas de artillería de gran calibre, vehículos aéreos, terrestres y marítimos de guerra.
Refirieron que, de acuerdo con el “Estudio Mundial sobre el Tráfico de Armas de Fuego 2020”, México registra una proporción de fusiles incautado mayor a otros países de América Latina y el Caribe.
Por ello, subrayaron, el papel que juega nuestro país en la región es fundamental para acabar con los conflictos armados y para que los gobiernos puedan tomar medidas que ayuden en el combate de este tipo de situaciones, que amenazan la vida de las personas.
Es así, cómo en el marco de la “Semana del Desarme” celebrada por Naciones Unidas del 24 al 30 de octubre de cada año, resulta fundamental recordar la importancia de hacer un llamado de atención en la materia, advirtieron.
Es necesario, coincidieron, intensificar los esfuerzos para eliminar el tráfico ilícito de armas convencionales que, por su facilidad de transporte y adquisición, representa un riesgo mayor para la paz y seguridad internacionales.
El Punto de Acuerdo fue turnado de manera directa a la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y el Caribe.