Entrelineas
Discurso complaciente de Gabino Cué ante Enrique Peña Nieto
Miguel Ángel Schultz
El discurso acrítico expresado ayer por el gobernador Gabino Cué ante el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, no hizo ninguna referencia a las enormes desigualdades que existen en Oaxaca, ni a la posible cancelación de los proyectos carreteros, por falta de recursos de la Federación por la caída del precio del petróleo, que comunicarán a la capital del estado con la Costa y el Istmo de Tehuantepec. El discurso anodino del mandatario estatal pinta de cuerpo entero el fracaso del llamado gobierno del cambio, que terminó siendo igual o peor que los gobiernos priistas, por su incapacidad para gobernar.
Junto con Peña Nieto, viajaron el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell; de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong y el director General de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Enrique Ochoa Reza.
En las proximidades del evento oficial, decenas de estudiantes de la Escuela Normal Rural Urbana del Istmo, integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y de organizaciones sociales antieólicos, unas mil 500 personas, realizaron dos bloqueos carreteros en repudio a la presencia del presidente.
También, se confrontaron con elementos del Estado Mayor Presidencial y de la Policía Federal en el Puente la Ventosa Juchitán, a la altura del kilómetro 238, en la entrada de la población La Mata, sin que se reportarán detenidos o lesionados, que ameritaran atención médica. Este hecho habla del malestar que existe en Oaxaca hacia los gobiernos estatal y federal, que han sido incapaces de atender los reclamos de la sociedad, para que sean escuchadas y atendidas sus demandas.
No es de extrañar que el actual proceso electoral que se vive en Oaxaca, se traduzca en mera disputa por el poder, donde las inconsistencias políticas e ideológicas, provocan los desgarres que se están dando entre las principales personajes de la política local, que usan a los partidos políticos como herramientas para asaltar al Gobierno del Estado, sin propuestas, con el sólo argumento que son los mejores hombres, que nacieron para gobernarnos.
No es de extrañar que el Partido del Trabajo (PT) abandone sin más ni más la coalición que conformó con los partidos Acción Nacional (PAN) y el de la Revolución Democrática (PRD), y que ahora postule a Benjamín Robles Montoya y que deje en la orfandad a José Antonio Estefan Garfias. Esta situación hace tambalear la coalición entre estos partidos; que el dirigente del PRD, Carol Antonio Altamirano, al abordar el tema ante los medios de comunicación, su principal argumento refleje su pobreza ideológica, cuando sólo atina a decir, “Benjamín es un esquirol”, en tanto el dirigente del PAN, Juan Mendoza Reyes, guarda silencio. Desde luego que está fractura de la oposición, que no de la izquierda de Oaxaca, abre la brecha para que regrese el PRI, con Alejandro Murat a gobernar Oaxaca.
Por ello, el discurso de Gabino Cué refleja el bajo nivel de las fuerzas que hoy se disputan más que el poder político, el presupuesto del gobierno de Oaxaca, así lo hace ver su falta de compromisos con la palabra que empeña, con la soberbia con la que se comportan, con los fracasos que están cosechando, antes que la contienda empiece y que alejará a los votantes de las urnas. Lo peor que podrá hacer la ciudadanía es dejar de ir a sufragar el día de la elección.
El Entre
¿Qué vendría a decirle Osorio Chong a Gabino Cué? Llama la atención que haya estado en este evento el segundo hombre en importancia del gobierno de México, Osorio Chog. Que nada tiene que ver con la política del sector energético y sí mucho con la política interna del país. Más aun cuando por medidas de seguridad de Estado, por regla general, evitan viajar juntos, el presidente y el secretario de gobernación, ya que no se pueden poner en riesgo estos mandos, por si llegara a ocurrir un accidente, que comprometiera la salud de ambos. No es posible pensar que Osorio Chong haya venido a disfrutar de unas ricas garnachas o deleitarse con un caldo de iguana o comer huevos de tortuga. Seguramente tenía una agenda importante que desahogar con el mandatario estatal, para haber viajado con el presidente. Hay que recordar que durante el sexenio de Felipe Calderón, murieron dos secretarios de Gobernación, en accidentes aéreos; Juan Camilo Mouriño el 4 de noviembre de 2008, cuando volvía a la Ciudad de México después de una gira a San Luis Potosí, en un avión Learjet 45 matrícula XC-VMC, que se precipitó a tierra minutos antes de aterrizar y que cayó en una zona densamente poblada de la capital mexicana. Posteriormente, Francisco Blake Mora, secretario de Gobernación, falleció el viernes 11 de junio del año 2011, cuando viajaba de la ciudad de México al estado de Morelos al desplomarse el helicóptero Súper Puma AS332. Con él viajaban siete personas más entre funcionarios y tripulación de la nave. Accidente ocurrido también durante el sexenio de Felipe Calderón, del PAN.
Las Líneas
Momento de gran tensión vivieron los feligreses ayer por la tarde noche en la parroquia “Juquilita”, ubicada en la Unidad Habitacional Ricardo Flores Magón cuando se presentaron el vicario Francisco Reyes Ochoa y el secretario canciller Lorenzo Fanelli y el párroco Martín Octavio, con personas armadas, para intentar sacar de la Iglesia a Manuel Arias y a otros sacerdotes que se encontraban en el lugar. Situación que tiene su origen en la denuncia que han hechos por casos de pederastia de sacerdotes de la Iglesia Católica, que han abusado por lo menos de cien niños indígenas, prueba de ello es que está en la cárcel el sacerdote Gerardo Silvestre Hernández, presunto responsable de más de 45 casos de pederastia en Oaxaca. El martes Gabino Cué desayunó en privado con el Arzobispo de Antequera Oaxaca, José Luis Chávez Botello.
@MiguelAschulz