México DF.- El director de Drenaje y Tratamiento de Reuso del SACM, Miguel Carmona Suárez, explicó que el nuevo concreto utilizado otorga una resistencia mayor a las paredes del Drenaje Profundo, a las que se adhirió una membrana plástica que se endurece con el colado, se usa material innovador por lo que garantiza su funcionamiento, durante los siguientes años.
El revestimiento hecho de polivinilo de cloruro está diseñado para proteger estructuras de hormigón, por lo que fortalecerá los trabajos realizados en el drenaje, al disminuir los efectos corrosivos producidos por el ácido sulfhídrico y otros gases de alcantarillado.
Se ha utilizado una cimbra metálica autocolapsable que cuenta con 18 metros de longitud, precisó Eleuterio Castro Castro, supervisor encargado en el tramo que comprende la Lumbrera 13 y la Lumbrera 0B.
Carmona Suárez, señaló que la cimbra son módulos metálicos que se adaptan a la circunferencia del túnel a diferencia de los armados convencionales hechos a base de trancas poco prácticas para esta obra, por lo que antes de iniciar los trabajos de reparación se construyó exclusivamente este equipo.
Precisó que se encontró un terreno más estable a 25 y 30 metros de profundidad, por lo no se han registrado problemas en la zona estructural durante los temblores recientes. No obstante, las revisiones continuarán cada año, ante la resistencia de un sismo.
Refirió que el personal está capacitado, por lo que al registrase un movimiento telúrico, suena una alarma que indica a los trabajadores abandonar la zona.
Respecto al procedimiento que se utiliza para la rehabilitación del drenaje, Castro Castro refirió que el colado del revestimiento utiliza un concreto de resistencia de 350 kilogramos por centímetro cuadrado.
“A través de unas boquillas de inyección se llena la cimbra metálica a través de una tubería especial. El concreto especial fluye solo sin la necesidad del vibrado, por lo que se autonivela por toda la cimbra”, agregó al especificar que una vez que se llena uno de tres módulos, se hace un cambio de boquilla.
La capa de concreto tiene un espesor de 20 a 25 centímetros. Sin embargo varía porque el túnel anterior tiene diferentes diametros debido a la corrosión que han afectado sus paredes
“En algunas partes tenemos un diámetro de 5.20 a 5 metros de circunferencia, por eso los espesores cambian en cada una de las secciones”, mencionó.
Para los trabajos dentro del drenaje se ha necesitado un equipo de 90 personas divididas en dos turnos de 12 horas, mismos que se han encargado de aplicar un colado diario por las mañanas y descimbrar por las tardes.
Una vez que se retira la cimbra, el personal comienza a deslizar un rollo de 9 metros de longitud por 6 de largo, colocándolo sobre la clave de la cimbra con unas placas metálicas que evitan que el concreto se meta entre la cimbra y la membrana.