Los legisladores, encabezados por el coordinador Miguel Barbosa Huerta, hablaron sobre la situación política, social y económica del país, que en el inicio del 2015 está marcado por la continuidad de la crisis económica y la pérdida de credibilidad de las instituciones.
Existe una economía frágil que enfrenta una drástica caída en los precios del petróleo, una devaluación del peso frente al dólar y un estancamiento económico. Existe malestar social derivado de la incapacidad de las autoridades ante la impunidad para impartir justicia. De cara a las próximas elecciones, en algunos estados y municipios existen condiciones que pueden poner en riesgo la normalidad democrática.
Los senadores señalaron que los anuncios gubernamentales son ajenos a la verdad en lo concerniente a energéticos e insuficientes en los demás temas, porque si bien pueden beneficiar a un sector específico, no tienen como efecto una reactivación económica general, ni contribuyen a resolver la crisis social en corto o mediano plazo.
A continuación el texto integro:
México, Distrito Federal, martes 06 de enero, 2015
PRONUNCIAMIENTO
Proponen senadores del PRD acciones sobre economía, seguridad, justicia, derechos humanos, combate a la corrupción y democracia
* Inicio del 2015 está marcado por la continuidad de la crisis económica y la pérdida de credibilidad de las instituciones.
Posicionamiento de las senadoras y los senadores del Grupo Parlamentario del PRD, encabezados por el coordinador Miguel Barbosa Huerta, sobre la situación política, social y económica del país.
Miguel Barbosa Huerta (MBH). Gracias, buenos días, representantes de los medios de información que han acompañado la actividad de todo el Senado y que han permitido que la comunicación de lo que hacemos con la sociedad sea una comunicación oportuna, sea una comunicación veraz, sea una comunicación completa.
En este año esperamos que sea más oportuna, más veraz y más completa, pero así los vemos a ustedes.
Les queremos decir como Grupo Parlamentario que les deseamos a ustedes, a sus familias, sus papás, sus hermanos, sus hijos, el mejor destino que puedan tener como cualquier mexicana o mexicano, que haya mucha paz interior para que podamos encontrar la tranquilidad que nos provoque la felicidad.
Eso es lo que les deseamos y les agradecemos, el trato recibido, lo hago a nombre del Grupo Parlamentario y lo hago acompañado esta mañana del senador Adolfo Romero Lainas, el senador Mario Delgado, el senador Alejandro Encinas, la senadora Lorena Cuéllar, la senador Alejandra Barrales, el senador Isidro Pedraza, la vicecoordinadora, la senadora Dolores Padierna, el senador Armando Ríos Piter, el senador, el senador Fidel Demédicis, el senador Zoé Robledo y la senadora Luz María Beristain.
Hoy es un día importante porque es el arranque para nosotros de una actividad pública, una actividad que intenta provocar un desempeño honesto y adecuado desde el Senado de la República, nos sentimos muy honrados de ser parte de este órgano del Estado y nos sentimos comprometidos a que 2015 sea un año que como todos los años tiene vicisitudes, como todos los años, tiene dificultades, pero que tendremos que hacerlo un buen año, todos quienes servimos al país y toda la sociedad en su conjunto.
No hay malos años, hay que hacer de cada año, de cada anualidad un espacio de tiempo en el que se puedan cumplir las metas que todos tenemos, como personas, como sociedad, como parte de las instituciones del Estado.
Felicidades, felicidades del parte del Grupo Parlamentario, de los 22 senadores y senadoras, hoy no pudieron estar 11 porque andan en actividades personales, pero en nombre de ellos también les damos un abrazo y les deseamos los mejor para este año. Felicidades.
Bueno, queremos nosotros hacer un planteamiento general y queremos dar a conocer propuestas sobre acciones políticas, no intenta ser el planteamiento de un programa, un planteamiento programático; no intenta ser una agenda legislativa, ésa, tanto el programa como la agenda legislativa se derivarán de nuestra plenaria previo al arranque del periodo ordinario siguiente, que vamos a llevar a cabo los días 29 y 30 de enero en la Hacienda de los Morales, acá en la ciudad de México, en la que haremos todo un debate interno con profesionales, con asesores para tener una agenda legislativa a desarrollar durante el años siguiente.
Lo que hoy hacemos y damos a conocer es una declaración del Grupo Parlamentario ante este momento político, ante este momento que vive el país y que vive nuestra sociedad.
Me voy a permitir, y si ustedes me lo permiten, dar lectura al mismo y después atender las preguntas que ustedes tengan a bien realizar, tanto al servidor, como a los demás senadores y senadoras presentes.
Dice así:
Declaración del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática
Ante la situación de crisis que vive el país, ante el mensaje de inicio de año del titular del Poder Ejecutivo y ante la responsabilidad de responder a la sociedad, el Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en el Senado expresa lo siguiente:
Primero. El inicio del 2015 está marcado por la continuidad de la crisis en materia económica y social, y por la pérdida de credibilidad de las instituciones del Estado mexicano. Existe una economía frágil que enfrenta una drástica caída en los precios del petróleo, una devaluación del peso frente al dólar y un estancamiento económico. Existe malestar social derivado de la incapacidad de las autoridades ante la impunidad para impartir justicia. De cara a las elecciones de junio, en algunos estados y municipios existen condiciones que pueden poner en riesgo la normalidad democrática.
En este momento, el escepticismo y la indignación social es grande, particularmente entre los jóvenes. Vivimos en un país en donde uno de los sectores sociales más importantes no cree en las autoridades y siente temor de los policías y de los militares.
Segundo. Los anuncios recientes del gobierno federal son insuficientes para enfrentar esta crisis. Terminar con los gasolinazos, eliminar los abusos en los precios de las largas distancias nacionales y destinar apoyo al campo, particularmente en el Sur del país, son parte del cumplimiento de reformas ya aprobadas.
Estos anuncios gubernamentales son ajenos a la verdad en lo concerniente a energéticos e insuficientes en los demás temas, porque si bien pueden beneficiar a un sector específico, no tienen como efecto una reactivación económica general, ni contribuyen a resolver la crisis social en corto o mediano plazo.
La solución a la situación que vive el país no es un asunto de ideologías, no es un tema de izquierdas o de derechas, sino de responsabilidad política.
Tercero. El mensaje del titular del Poder Ejecutivo deja fuera un obligado ejercicio de autocrítica. Se habla de un país y de una circunstancia que se presenta como si ésta fuera ajena al ámbito de acción de la autoridad.
No hubo un anuncio importante del gobierno y por tanto, la sociedad permanece en la incertidumbre. La duda que queda en la sociedad es si el Gobierno quiere salvar al Estado, si es capaz de reconocer que instituciones y personas tienen responsabilidades en los hechos de Iguala. El Presidente no se ha pronunciado respecto a este tema, ni al combate a la narcopolítica. Tampoco ha realizado los ajustes a su gabinete que le permitan generar nuevos comportamientos y políticas. Sería lamentable que la estrategia del Gobierno ante el expediente Ayotzinapa fuera apostarle al desgaste o al olvido.
Cuarto. Para que las instituciones puedan recuperar credibilidad resulta necesario formular y responder cuestionamientos como: ¿Qué no ha hecho el Poder Ejecutivo? ¿Qué no ha hecho el Poder Judicial? ¿Qué no hemos hecho en el Congreso? Desde el Legislativo, debe reconocerse que no hemos sido capaces de construir un ejercicio parlamentario autónomo o independiente; en momentos importantes de esta Legislatura, han pesado más los intereses de grupo o de partido.
Consideramos que debe existir un ejercicio parlamentario fuera del protagonismo. Debemos de legislar de manera responsable y construir un Legislativo que realmente actúe como un poder autónomo del Estado y como un eficaz control y contrapeso al Ejecutivo.
El Poder Judicial es un poder intocado. Debe ser capaz de ejercer un ejercicio de autocrítica, el Poder Judicial debe hacer un ejercicio de autocrítica para que pueda contribuir de manera efectiva a construir un país de leyes y de derechos. En este poder también se han expresado divisiones, si no, el espectáculo que se vio en la elección del Presidente de la Corte. Y en temas específicos, se han hecho presentes intereses que inciden en sus decisiones. México espera que las causas de la justicia sean también las causas del Poder Judicial. No habrá reforma del Estado sin que se haga una profunda transformación a este Poder, al Poder Judicial.
En el Ejecutivo, además de revelarse como malos gobernantes, se vislumbran rasgos preocupantes de autoritarismo y un sistemático rechazo a cualquier control democrático.
Si no pregúntense si no han sido los momentos más tensos en la formación de leyes cuando hemos querido incorporar controles democráticos, controles democráticos, desde la historias de las reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública de la Federación, cuando desde aquí impusimos controles democráticos que finalmente fueron eliminados a través de controversias constitucionales.
El Estado en su conjunto ha fallado y la superación de la crisis depende del trabajo conjunto de los poderes que lo integren.
Quinto. El actual viaje del Presidente y de una parte importante de su gabinete a Estados Unidos sugiere que este año permanecerá la costumbre de primero consultar y acordar en el exterior del país, y después simplemente informar a los mexicanos.
Sexto. El año que inicia tiene como pendientes legislativos la aprobación del sistema anticorrupción, la revisión integral de la política salarial, la reforma en materia de transparencia, la seguridad pública, la que nos envió el presidente Peña y que tendrá que ser enriquecida, reformada o en su caso votado su destino; la reforma en propaganda gubernamental y la reforma política del Distrito Federal.
Ante la situación del país, el Grupo Parlamentario del PRD propone acciones y decisiones en tres ejes: 1) economía familiar, 2) seguridad, justicia, derechos humanos, combate a la impunidad y a la corrupción, y 3) normalidad democrática.
Economía familiar y propuestas:
La izquierda sostiene que es necesario aplicar otro proyecto económico que atienda el mercado interno y aplique una mejor política industrial. La situación económica y las perspectivas negativas para este año hacen necesarias medidas emergentes, entre las cuales se encuentran:
Aumento de los salarios. Se debe realizar una revisión integral de los salarios para iniciar un proceso de recuperación que mejore el poder adquisitivo de los trabajadores de menores ingresos; así como, la disminución de los salarios de la alta burocracia y sus privilegios. Debe enfatizarse, la creación de más empleos y mejores remuneraciones, tal y como lo establece la Constitución.
Ampliar el sistema de becas en todo el país. Uno de los apoyos más significativos a la economía de las familias son los referentes a los gastos escolares. Si en verdad queremos apoyar a los jóvenes, particularmente en el nivel medio superior, y sustraerlos de dinámicas que los acerquen al crimen organizado, debemos realizar esfuerzos adicionales para que continúen con sus estudios.
Ampliar los apoyos a mujeres jefas de familia. Casi un tercio de los hogares en México son sostenidos por mujeres y no existen políticas eficaces que mejoren de manera real sus perspectivas de calidad de vida, fuera de visiones asistencialistas o clientelares.
Incrementar los apoyos a los adultos mayores. Cada vez más los adultos mayores requieren de políticas encaminadas a garantizarles bienestar social y económico, como un principio básico de solidaridad social.
Eliminar trámites excesivos para emprender negocios. La carga burocrática para iniciar un negocio es inmensa. Ningún apoyo a jóvenes emprendedores será efectivo si no se simplifica los trámites para las micro, pequeñas y medianas empresas y se disminuyen los costos de los mismos.
Apoyo al campo. En lo que va de este sexenio, el campo no ha sido objeto de la atención del Gobierno Federal o del Legislativo. Su abandono es histórico y su atención es urgente. Si no se toman medidas en lo inmediato el colapso económico de este sector será inminente.
Establecer una política real para la erradicación de la pobreza alimentaria. Urge hacer una política no asistencial para erradicar el hambre, por lo cual el PRD propone que se asuma la Declaración de Roma sobre la nutrición.
Establecer un plan efectivo de austeridad gubernamental. La sociedad percibe no sólo un gobierno corrupto, sino también despilfarrador, por lo que es necesario un amplio plan de austeridad y rendición de cuentas en el ejercicio de los recursos públicos.
Segundo eje: Seguridad pública, impartición de justicia, derechos humanos y combate a la corrupción y a la impunidad.
Se deben ya dar a conocer los resultados de la investigación de los casos Iguala-Cocula y Tlataya. Las indagatorias sobre los desaparecidos de Ayotzinapa, a más de tres meses de los hechos, debe estar concluida, está concluida, por lo que no existe justificación para no dar a conocer sus resultados. Lamentablemente, tal parece que el Gobierno ha decidido no revelar la totalidad de los vínculos del crimen organizado con las instituciones presentes en la región de Iguala y Cocula. Tal parece que se apuesta erróneamente al desgaste de la protesta social y a la corta memoria. En el caso de Tlatlaya, el gobierno se ha negado a reconocer las responsabilidades de las autoridades involucradas en estos hechos.
Como se ha mencionado, los problemas no se resolverán por el simple transcurso del tiempo o suponiendo que no existen.
Eliminación del fuero. El Congreso tiene la responsabilidad de retomar, reencauzar y eliminar el fuero para terminar con los privilegios y como una forma de combatir la impunidad. La única posibilidad de recuperar la credibilidad del Estado es sancionar a todos los responsables, sin importar niveles e instituciones a las que pertenezcan, sin ningún resquicio para la impunidad.
Cambios en el Gabinete. En un sistema democrático, ante las fallas en el ejercicio del servicio público, existen responsabilidades políticas. El gobierno federal debe hacer cambios en su gabinete en las áreas que sean necesarias para mandar mensajes claros a la sociedad de que existe la voluntad para hacer las cosas de una manera diferente. Mantener la actual integración del gabinete abona a la percepción de impunidad que la sociedad tiene sobre el gobierno.
Normalidad democrática
Se requiere establecer las acciones necesarias que garanticen que la elección federal y los procesos locales del próximo 7 de junio, se realicen bajo los principios de certeza, legalidad, independencia, imparcialidad, objetividad y máxima publicidad, para preservar el Estado de Derecho.
Es la declaración que hacemos, que damos a conocer del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado de la República.
