* La UNICEF, dispuesta a cooperar para que los menores mexicanos tengan una vida sana: Crowley
* La política social integral impacta en los indicadores de la pobreza: Nemer Álvarez
México, DF., 01-jul-2015.- El consultor de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Seguridad Alimentaria, Gustavo Gordillo de Anda, consideró “muy importante que el Gobierno de la República haya empezado a hablar del hambre, porque era un tema que se eludía”.
Gordillo de Anda dijo que “se ha avanzado en la política alimentaria, porque la Cruzada Nacional contra el Hambre (CNcH) toma cuatro de los cinco objetivos que plantea la iniciativa Hambre Cero que la ONU lanzó en Río de Janeiro, Brasil, con énfasis en la participación comunitaria y la importancia de la reconstrucción nacional”.
A su vez, la representante en México del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Isabel Crowley, manifestó la disposición de la agencia internacional para cooperar con el Gobierno de México en cuatro ejes clave para la sana nutrición y vida de la niñez: la medición, el derecho de lactancia, la comunicación directa con las familias y la promoción de la lactancia materna exclusiva.
Por su parte, el subsecretario de Desarrollo Social y Humano de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Ernesto Nemer Álvarez, afirmó que el Gobierno de la República impulsa políticas públicas integrales focalizadas, con enfoque de derechos e inclusión social, para hacer efectivo el derecho a la alimentación de las familias en pobreza extrema alimentaria.
Al participar en el Seminario “El derecho a la alimentación y la seguridad alimentaria en México”, realizado en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), destacó que atrás quedaron las políticas individualistas y asistencialistas para dar paso a una política integral de impacto directo en los indicadores de alimentación, ingresos, educación, seguridad social y vivienda.
En la mesa de trabajo “Políticas públicas para la seguridad alimentaria y el derecho a la alimentación”, puso como ejemplo la CNcH, estrategia que tiene como meta atender a 7.01 millones de personas en pobreza extrema alimentaria, que en su primer año llegó a 405 municipios y en 2015 a mil 12.
La Sedesol, sostuvo el funcionario, incide en la mejora de la alimentación con Prospera Programa de Inclusión Social, que llega a 6.1 millones de familias, en sus vertientes de educación, salud y alimentación, y que ahora incorpora la inclusión productiva, para generar ingresos.
Asimismo, destacó los cambios realizados a la Ley de Coordinación Fiscal, que permitieron alinear esfuerzos en los tres niveles de gobierno mediante los 60 mil millones de pesos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) para atender las carencias sociales.
Nemer Álvarez enfatizó que “se han mejorado los instrumentos para hacer más efectivas las políticas públicas de combate a la pobreza; ampliado la cobertura de atención de los sectores más vulnerables, y se avanza en la superación del asistencialismo para pasar a una política pública de segunda generación”.