En Oaxaca la vida cristiana no se ha proyectado a la sociedad por lo que tenemos que reconocer nuestras limitaciones, y las limitaciones o vacios no son siempre culpabilidad, sino situaciones históricas o del tiempo, pero algunas si son vacios por falta de tomar la repuesta adecuada, señaló el Arzobispo de Oaxaca José Luis Chávez Botello.
Lo anterior lo expresó el jerarca de la Iglesia Católica en Oaxaca durante su conferencia dominical, en la que destacó que la deshumanización de la sociedad es lo que provoca que se registren robos, enfrentamientos, asesinatos, donde todos están inmiscuidos y que no han hecho su trabajo.
Se pronunció por un cambio de fondo de la sociedad no simplemente de leyes, es decir que no solo sea de técnica sino que el amor sea lo que produzca el cambio, por lo que exhortó que el Congreso no descuide de sus tareas, de revisar las leyes pero también de hacerlas cumplir.
De lo contario al no hacerlo, no habrá quejas y si nadie denuncia, es porque hay algo de fondo que hay que revisar, porque sino todo va explotar.
Alerto del riesgo de tener metas muy rabonas por lo que nos debemos de humanizar, de lo contario no vamos a proyectarnos en la vida y se preguntó el Arzobispo, sobre lo que pasaría si no se puede marcar a nadie ni a nada, sin inyectar esperanza, por eso los robos, asaltos, corrupción, divisiones, enfrentamientos, están manifestando que hay algo, son un grito muy fuerte que debemos escuchar, dijo.
Asimismo ante la expulsión de creyentes de otras religiones diferente a la católica de comunidades indígenas, se pronunció por revisar los usos y costumbres, ya que tienen elementos positivos, en el sentido de la comunidad y del servicio, pero hay aspectos que no van, como la expulsión de personas de otras religiones, con las persona humana y menos creer en Dios, porque Dios es padre de todos.
Al mismo tiempo que demando que este 14 de febrero Día del Amor y la Amistad sirva para recuperar el verdadero sentido del amor y no del falso amor , de uniones sin compromiso, de noviazgos violentos, que son signos de superficialidad, por lo que es necesario buscar y dar amor verdadero.