Un canciller rezandero
Por el sabio Tao
El panista José Antonio Meade, hechura del doctor Luis Videgaray en la cancillería, aún no entiende de las sutilezas emanados de la turbulenta historia del país en relación con la aún existente separación del Estado de los asuntos eclesiásticos. Con Fox y Calderón se confundían los poderes celestiales con los terrenales porque ambos son mochilones profundos. No tienen remedio.
El canciller Meade cree vivir aún en el mochilongo gobierno de Calderón porque durante el acto que reunió a al presidente Peña Nieto con funcionarios de la ONU encabezados por la doctora Helen Clark y a la que asistieron diplomáticos, funcionarios de la cancillería y los magistrados del Tribunal Federal Electoral se le ocurrió un chiste fuera de contexto. Comparó el Informe sobre Desarrollo Humano 2013 denominado “El ascenso del sur” con el supuesto carácter divino de la elección del Papa argentino.
Si se entiende que el presidente Peña Nieto irá a Roma a la ceremonia donde el cuestionado Papa Francisco asumirá el trono del partido más antiguo del mundo es porque representa un Estado con el cual el Estado mexicano estableció relaciones, desde la modificación, durante el salinato, de los artículos 24 y 130 de la Constitución.
El sabio Tao piensa que mochilones como Meade no se deben confundir con los sexenios de Fox y Calderón porque una cosa es tener el derecho y libertad a profesar la religión que cualquier mexicano decida, así sea la del “ya no sufras” y otra andar con la cruda de vino celestial en pleno salón Adolfo López Mateos de la residencia presidencial de Los Pinos.
El chiste del canciller Meade no cayó muy bien en el mundo diplomático, pero sobre todo a los magistrados que tuvieron a cargo la elección presidencial del año pasado. Al mismo presidente Peña se le observó serio con el mal chiste de Meade. El canciller dijo: “es inevitable señalar que el Ascenso del Sur parece haber sido un gran nombre para este reporte. Muy vigente, casi podría uno decir, de inspiración divina”. Ja,ja, ja…
El sabio Tao opina que es necesario tener muy clara la separación entre el carácter laico del Estado y el poder divino. La historia juarista lo dice muy clarito, sobre todo porque estamos en la víspera de otro 21 de marzo. Por eso se entiende que un hombre de leyes que conoce de nuestra historia, Mariano Palacio Alcocer, será el embajador en El Vaticano.
