
“Quiero ser pintor”, fue la respuesta de Noé Díaz cuando su padre lo cuestionó sobre la vocación que quería ejercer en la vida, a lo que su progenitor contestó serenamente y con su adusto semblante “eso no da de comer”.
Comprometido e inmerso con los quehaceres que “dan de comer”, pasaron más de 30 años para que Díaz se iniciara de forma autodidacta en las artes plásticas, para posteriormente asistir a clases de pintura, grabado y monotipo en la Casa de la Cultura Oaxaqueña (CCO) y el centro de las artes de San Agustín; así mismo tomo clases con el maestro Marco Bustamante.
Con más de 24 piezas elaboradas en técnicas como oleo, marmolina esgrafiada y acrílica el autor refleja el resultado que ha obtenido al inspirarse entre lo nuestro y lo que llamamos “el otro mundo”.
Noé Díaz utilizo como fuente de inspiración lo que él llama “la sublimidad simbólica de los sentidos” y que le permitió conocer un lugar, donde el tiempo no es tiempo y que los recuerdos son los activos que dinamizan las cosas que allí suceden.
El autor de la exposición menciona “El otro mundo es fascinante, inspira plenitud de alegría, disfrute, color y deslizar imágenes de allá lo cual ha sido el matiz principal para la creación de todas estas piezas”, finaliza Díaz.
La cita para inaugurar esta exposición ESTO: ¡Es otro mundo! es el jueves 17 de noviembre a las 19:00 horas en la galería Rufino Tamayo de la Casa de la Cultura Oaxaqueña, ubicada en González Ortega 403, en el barrio de los Siete Príncipes, Centro Histórico.
