Oaxaca, Oax., 20-sep-2016.- En el marco del Día Mundial del Linfoma (cáncer), el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) refuerza su compromiso de informar a la población sobre dicha patología, permitiendo reconocer los síntomas y su tratamiento.
En general, el linfoma es un tipo de cáncer que se desarrolla cuando se produce un fallo en la forma de actuar de los linfocitos (células blancas de la sangre que ayudan a luchar contra las infecciones). Este fallo provoca la creación de una célula anormal que se convierte en cancerosa, provocando así que estos crezcan en muchas partes del cuerpo, incluyendo los nódulos linfáticos, la médula ósea, la sangre y órganos diversos, etcétera.
La mayoría de los cánceres se nombran por su lugar de origen, por ejemplo, el cáncer de pulmón comienza en el pulmón y el cáncer de seno comienza en el seno. La diseminación de un cáncer desde una parte del cuerpo a otra se denomina metástasis.
Ángel Porras Ramírez, oncólogo del Hospital General de Zona 1 del IMSS, refiere que diagnosticar un linfoma en sus comienzos puede ser difícil. En general, el síntoma más común es la presencia de un bulto, que no suele ser doloroso, en cuello, axila o ingles.
Algunos pacientes pueden presentar fiebre, sudoración nocturna, pérdida de peso o cansancio, por lo que se pueden confundir fácilmente con enfermedades comunes como gripe o mononucleosis.
Los síntomas y el tratamiento dependen del tipo de cáncer y de lo avanzada que esté la enfermedad. Algunos de los tratamientos más comunes para combatir el cáncer son: la cirugía, radiación y quimioterapia.
Algunos de los factores detonantes de este padecimiento puede ser, la falta de ejercicio, el consumo excesivo de tabaco y bebidas alcohólicas, así como el estrés, la contaminación ambiental y factores hereditarios.
Ante este panorama el médico especialista del IMSS hace un llamado especial a la población a que visite a su médico, se realice evaluaciones periódicas de salud con el objetivo de detectar enfermedades en etapa inicial o factores de riesgo.
Asimismo, hace especial hincapié en la importancia de la detección temprana ya que a través de la auto exploración (como en el cáncer de mama), o la realización de pruebas como el Papanicolaou (cáncer cervicouterino) o un ultrasonido trans-rectal (cáncer de próstata), la enfermedad se puede prevenir.