Oaxaca.- Juez dictan auto de formal prisión a los dos primeros implicados en la masacre de Santiago Choapam, que costó la vida a 10 indígenas chinantecos y en donde resultaron heridos por disparos de armas de fuego por lo menos nueve personas más.
Wilfrido Solís Cano y a Denisse Gutiérrez Jarquín fueron internados en el penal de Ixcotel, en la capital de Oaxaca, en tanto que fue puesto en libertad, Sergio Hernández Luciano, al no encontrarle responsabilidad en los sangrientos hechos.
De acuerdo al expediente 87/2011el sábado 14 de mayo un numeroso grupo de vecinos de la agencia San Juan del Río, del municipio de Santiago Choapam, se trasladaba en ocho camionetas a la cabecera municipal a fin de instalar el Consejo Electoral Municipal, para poner fin al conflicto político electoral que se vivía en la municipalidad.
Sin embargo, los habitantes de la cabecera municipal estaban en total desacuerdo que participaran los pobladores de las agencias, por lo que cortaron el paso en el camino con zanjas y motones de tierra.
Los pobladores de San Juan del Río realizaban el viaje sin contratiempos, a bordo de ocho camionetas, pero en el paraje “El Portillo”, encontraron bloqueado el camino por profunda zanja y montones de tierra que trataron de retirar, para continuar su camino, cuando fueron atacados a balazos.
En el lugar paraje “El Portillo” cayeron acribillados Juan Sánchez Cardoza; Celestino de Dios Manuel; Miguel Ángel Pérez Basilio; Octaviano Gómez Cuevas; Amador Donato López Castro; Bonifacio Cruz López; Aquileo Cruz López; Herculano Martínez Carrera, Carlos García Yescas y Nicodemo Peralta.
El conflicto político y la posterior masacre derivaron en una serie de acusaciones entre la Secretaría General de Gobierno, Irma Piñeyro Arias y el presidente del Consejo General del Instituto Estatal Electora y Participación Ciudadana, Alberto Alonso Criollo, ya que ambos se señalan mutuamente culpables de los hechos.
A Irma Piñeyro se le responsabiliza por no haber brindado la seguridad necesaria, a pesar de estar advertida de los hechos de sangre que se podría suscitar; en tanto a Alonso Criollo, nombrado recientemente en el cargo, se le responsabiliza de los hechos al haber convocado a la constitución del Comité Electoral Municipal, a sabiendas de los riesgos que implicaba hacerlo.