MÉXICO, DF.- La Conferencia del Episcopado mexicano (CEM) ha dado libertad a los sacerdotes de las localidades más afectadas por la ola de violencia que azota al país para que suspendan determinados servicios, con el fin de “proteger a la población” , declararon hoy fuentes de la institución.
“Debemos anteponernos a las situaciones que puedan darse, para evitar peligros, y tomar las medidas más oportunas para proteger a la población” , explicó a Efe Manuel Corral, encargado de Relaciones Públicas de la CEM.
El secretario general del CEM y obispo de Texcoco, Víctor René Rodríguez, anunció ayer durante la XC Asamblea Plenaria de la CEM que cada párroco podrá mover los horarios de las misas, cursos y demás actividades vespertinas si lo considera necesario, pero que en ningún caso abandonarán sus puestos.
En lo que va de año las pugnas entre clanes del narcotráfico se han cobrado en México unas 10 mil vidas, según estimaciones periodísticas.
En principio la directriz será aplicable sobre todo en estados norteños como Tamaulipas, Nuevo León y Sinaloa, indicó Corral.
Aunque la situación en determinadas parroquias de otras zonas como Michoacán, Veracruz y la serranía de Puebla, también ha provocado que algunos párrocos hayan modificado o eliminado horarios de misa para prevenir actos violentos.
“No se trata únicamente de una decisión de sacerdotes sino de toda la comunidad de feligreses” , dijo el portavoz, y ésta afecta a otras actividades de las parroquias, como los grupos y los cursos de formación.
Es en las tardes y en las noches, relató el prelado, cuando arrecia la violencia, “y la población está restringiendo su asistencia a los servicios religiosos de estas horas” , a pesar de que fueran los más frecuentados por no coincidir con horario laboral.
Ello tiene consecuencias negativas para la Iglesia, que está viendo en muchas localidades cómo se reducen las colectas y las ofrendas que ayudan a su sustento, agregó Corral.
El desempleo derivado de la falta de inversión en las regiones más inseguras y “la extorsión y la corrupción” que operan en determinados pueblos también afecta a los recursos de los feligreses, que ya no pueden realizar las mismas aportaciones que antes, reconoció.
El sacerdote recordó que esta situación “no es novedosa, viene de tiempo atrás y se ha ido incrementando” , y pronosticó que se prolongará durante lo que queda de mandato del presidente Felipe Calderón, “mientras los grupos de delincuentes se repliegan” .
Desde el comienzo de su sexenio, Calderón inició una estrategia de combate al narcotráfico de la que ha advertido en varias ocasiones que costará vidas humanas.
Las autoridades han admitido que, desde que Calderón asumió el poder, suman más de 28 mil muertos atribuidos al crimen organizado.