Entrelineas
Miguel Ángel Schultz
Juchitán se ahoga en un baño de sangre ante la indiferencia de los gobiernos estatal y federal, tal pareciera que las autoridades al dejar a su suerte al pueblo de Juchitán de Zaragoza, le dan un escarmiento a ese municipio de la región del Istmo que desde siempre ha defendido su soberanía y sus recursos naturales, a pesar de sus graves errores, lo que no justifica la inseguridad que hoy vive esa zona del estado, que se expresa en la ejecución de cinco personas -el domingo por la madrugada- que habían invadido un predio de la empresa Telmex tiempo atrás.
El domingo coincidentemente partió la caravana de Juchitán a Oaxaca, encabezada por el Cabildo y su presidente municipal, Saúl Vicente Vázquez, miembro de la Coalición Obrero Campesina Estudiantil del Istmo (COCEI), para solicitar algo que se antoja desproporcionado y patético, audiencia con el señor gobernador Gabino Cué Monteagudo, quien se comporta como un faraón, que despacha en la Casa del Pueblo, como le bautizó al Palacio de Gobierno, al inicio de su mandato, para remarcar que preside una administración que representa los intereses del pueblo de Oaxaca, según su criterio.
La ola de secuestros, asaltos, robos, extorsiones, ejecuciones (ahora masivas), han ido creciendo ante la indiferencia de un gobierno, que se jacta ubicar a Oaxaca entre las 10 entidades más seguras del país. Sin tomar en cuenta que el país mismo es un cementerio clandestino, donde las desapariciones forzadas suman 26 mil 798 casos de personas no localizadas, según cifras de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dadas a conocer a inicios de marzo pasado, por su presidente y relator para México, Jame Cavallaro.
En la ejecución de los cinco invasores en Juchitán, llama la atención que ésta se haya realizado en un operativo propio de los comandos de la muerte, que han actuado en otros países; que el predio sea propiedad de Telmex y que den 12 horas para su desocupación, como si fueran quienes le hicieran el trabajo sucio a la telefónica más importante de México.
Además, que las autoridades que dieron la información del hecho hayan identificado a los ejecutados como integrantes de la COCEI, que hasta donde tengo información, no formaban parte de esta agrupación, surgida en el año de 1974.
Desde días atrás en diversas calles y caminos de Juchitán aparecieron mensajes estableciendo un toque de queda e indicando que nadie viaje en automóviles con vidrios polarizados, so pena de ser acribillados; advierten a Juan Terán y a sus hermanas que se vayan; el mensaje también va dirigido a políticos y gobiernos -suponemos que funcionarios- y señalan que sus operativos se realizarán en los municipios de Tehuantepec, Salina Cruz y otras 10 localidades más, por ello hoy la población de la región del Istmo, se resguarda en sus casas al caer la noche, mientras las autoridades siguen repitiendo que Oaxaca es una de las 10 entidades más seguras del país.
El Entre
La marcha carava para pedir audiencia a Cué Monteagudo -que encabeza el Cabildo de Juchitán que preside Saúl Vicente- recibió respuesta ayer cuando se encontraba en Jalapa del Marqués, por lo que valoran la propuesta del Ejecutivo estatal a fin de determinar si continúan hacia la capital del estado o dan por satisfechas sus demandas y suspenden su protesta al considerar que han alcanzado sus objetivos.
Las Líneas
Resulta que siempre los indígenas zoques de Los Chimalapas tienen la razón y la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió, mediante amparo, que no hay sustento en la creación del municipio de Belisario Domínguez, establecido por el Gobierno de Chiapas, desde el año 2013, lo que demuestra que han estado prácticamente solos defendiendo el territorio de Oaxaca, frente a la invasión de los chiapanecos, veracruzanos y michoacanos, alentadas por el gobierno chiapaneco que encabeza Manuel Velasco Coello, quien sigue la misma línea de su antecesor alentando la invasión del territorio oaxaqueño. Por cierto Velasco Coello fue invitado de honor al inicio de la campaña priista de Alejandro (sin el apellido Murat), por ello tal vez no escuchó ninguna referencia del conflicto de la invasión como un problema fundamental para Oaxaca por parte del candidato tricolor. Aunque del otro lado, el oaxaqueñísimo José Antonio Estefan Garfias no dice nada del tema, como tampoco lo hace el candidato de la honestidad, Benjamín Robles Montoya.
@MiguelAschulz