Oaxaca, Oax.- El paso del huracán “Carlotta” en junio del 2012, que afectó las regiones de la Costa y Sierra Sur de Oaxaca, dejó la acumulación de matorrales secos, ligeros y pesados, que propicia las condiciones idóneas para que diversos ecosistemas puedan quemarse más rápido en la próxima temporada de incendios forestales, informó el titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Forestal, Pesca y Acuacultura (SEDAFPA), Salomón Jara Cruz.
Alertó que en este 2013, se prevé con mayor vulnerabilidad a las regiones de la Costa, sobre todo la zona de Santa Catarina Juquila y San Pedro Pochutla; y en la Sierra Sur, Miahuatlán de Porfirio Díaz, debido a las constantes lluvias del año pasado, actualmente se cuenta con acumulación de combustible tanto ligero como pesado, lo cual propicia las condiciones idóneas para generar incendios forestales.
En entrevista el también Presidente del Comité Estatal de Prevención y Combate de Incendios Forestales en Oaxaca agregó que en similar situación, se encuentra el distrito de San Carlos Yautepec, donde recientemente se realizaron trabajos de saneamiento forestal.
Reconoció la disposición y participación de representantes de las dependencias que integran el Comité Estatal de Prevención y Combate de Incendios Forestales, como son la Comisión Nacional Forestal, la Secretaría de la Defensa Nacional, el Instituto Estatal de Protección Civil y la SEDAFPA.
Jara Cruz recomendó a población que circule por las carreteras y caminos que eviten tirar colillas de cigarro, debido a que en esta temporada el pasto está seco y es más fácil que se genere un incendio, “hay que hacer conciencia, hay que cuidar nuestros bosques”.
El funcionario indicó que en lo que va de este 2013, solo se ha registrado un incendio forestal, en inmediaciones del municipio de San Pablo Coatlán, en la Sierra Sur, con una superficie afectada de siete hectáreas, principalmente de pasto, hierba y retoño.
Calificó como favorable esta estadística, toda vez, que al hacer un comparativo del mismo periodo -del 1 al 10 de enero del 2012-, se tenía el registro de seis incendios forestales y una afectación de 61 hectáreas.
En este sentido, destacó que debido al aumento en la temperatura y baja humedad, existe el riesgo de alguna contingencia ambiental por lo que se mantiene una vigilancia permanente.
