Un primer reporte preliminar sobre el origen de la tragedia en el edificio B2 del complejo de Pemex que ha causado hasta ahora 37 muertos y más de 100 lesionados, lo adjudica a una difusa, lenta y horizontal explosión de gas butano, según informó el Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam.

El funcionario, acompañado por peritos de la PGR, Defensa, Marina, Policía Federal, de la UNAM y de España, Estados Unidos y Gran Bretaña, descartó que la explosión haya sido causada por un artefacto explosivo.

No se encontró ningún cráter, agregó el funcionario en la conferencia de prensa a la que asistieron el secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, y el director de Pemex, Emilio Lozoya.

Murillo Karam dijo que la mayoría de las víctimas presentaban desmembramientos, a excepción de los tres trabajadores muertos que realizaban trabajos de inyección en los pilotos del edificio.

La explosión ocurrida la tarde del jueves pasado, de acuerdo al primer informe preliminar, se registró en los sótanos del edificio del complejo de Pemex ubicado en la colonia Anzures de la capital del país.

Por su parte, el director de Pemex aseguró que la institución garantizaba el apoyo de la institución a los familiares de las víctimas mortales y a os lesionados.

Murillo Karam, luego de asegurar que no hubo ningún atentado, desmintió que en una maleta se encontraban explosivos como lo difundió un periódico capitalino. Según el funcionario en la maleta se hallaron productos de belleza femeninos.