Oaxaca, Oax.- En el marco del Día Mundial contra el Trabajo Infantil que se conmemora este 12 junio, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) hace un llamado para que se adopte una perspectiva de derechos humanos y se atienda la problemática del trabajo infantil.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) instituyó ésta fecha con el propósito de visibilizar la situación, buscar apoyo y garantizar el derecho contra el trabajo infantil por parte de los gobiernos y demás actores sociales.
De acuerdo con información de la OIT en la actualidad cerca de 215 millones de niñas, niños y adolescentes trabajan en el mundo y más del 50 por ciento está expuesto a las peores formas de trabajo como esclavitud, ambiente peligroso y forzoso, así como aquellos que son obligados a participar en el tráfico de drogas o son víctimas de explotación sexual.
El trabajo infantil está prohibido en el Derecho Internacional, a pesar de esto, continúa presentándose, entre sus causas están la pobreza y la crisis económica.
En el estado de Oaxaca, los resultados del Módulo de Trabajo Infantil del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), muestran que de los más de un millón de niñas, niños y adolescentes entre cinco a 17 años, 159 mil 287 trabajan.
El Banco Mundial pone de manifiesto que un acceso temprano a la fuerza de trabajo aumenta la probabilidad de terminar sumido en la pobreza. La discriminación y la exclusión son factores que contribuyen a su perpetuación.
Entre los grupos más vulnerables en relación con el trabajo infantil están las niñas, las adolescentes, los pueblos indígenas, las personas de clase baja y las niñas, niños y adolescentes con discapacidad.
La Defensoría reitera la importancia de adoptar una perspectiva de derechos humanos para entender y atender mejor la problemática, pues para tener una sociedad en desarrollo y un estado de respeto a los derechos humanos, es necesario la eliminación del trabajo infantil, lo que implica la adopción de una serie de políticas públicas basadas en la situación real cotidiana de inestabilidad y crisis que genera pobreza, como una causa que obstaculiza la erradicación del trabajo infantil.