Ante el rompimiento de relaciones diplomáticas de Venezuela con Colombia, el Gobierno de México hace un amistoso llamado a los Gobiernos de ambos países para que sus diferencias sean resueltas a través del diálogo respetuoso, ya sea a nivel bilateral, o con el apoyo de mecanismos regionales que las partes consideren adecuados.
En ocasión de la visita a México, del Presidente electo de Colombia, Juan Manuel Santos, que se lleva a cabo en esta fecha, el Presidente Felipe Calderón compartió esta posición con el futuro Mandatario colombiano.
¿Qué significa la ruptura entre Venezuela y Colombia?
El gobierno de Venezuela rompió relaciones diplomáticas con Colombia en respuesta a las denuncias de Bogotá sobre la supuesta presencia de guerrilleros colombianos en territorio venezolano.
La ruptura fue anunciada por el presidente venezolano, Hugo Chávez, luego de las denuncias que presentó Bogotá ante el Consejo Permanente de la OEA sobre la presunta existencia de campamentos de las FARC y el ELN en territorio venezolano.
¿Qué significa romper relaciones diplomáticas?
De acuerdo con el profesor de política internacional de la London School of Economics (LSE), Francisco Panizza, la ruptura de relaciones diplomáticas entre ambos países es “el último paso” que se puede tomar a nivel diplomático.
La medida surge tras el agotamiento de otras decisiones previas como el llamado de embajadores a consultas, notas de protesta, etc.
En este sentido, la medida antecede una situación de “guerra” entre ambos países, escenario que no está planteado en este caso, indicó Panizza.
De acuerdo con la Embajada de Colombia en el Reino Unido, la ruptura de relaciones en términos prácticos implica “la pérdida por un tiempo, de la posibilidad de fortalecer los múltiples vínculos entre las dos naciones hermanas”.
¿Qué efectos concretos tiene la ruptura entre Venezuela y Colombia?
En líneas generales, la Embajada de Colombia en el Reino Unido afirmó que la medida implica que “se dificultará temporalmente el trabajo en conjunto de temas de interés común”.
¿Pero cómo se puede interpretar esto? Según Panizza, los efectos concretos de la ruptura de relaciones entre ambos países dependen de las medidas complementarias que apliquen los países involucrados.
El profesor de la LSE considera que en este caso las posibilidades, entre otras cosas, involucran: la suspensión de las relaciones comerciales, la restricción y/o suspensión del tránsito de personas, la prohibición y/o restricción de importaciones.
Por ahora, y a pesar de que se anunció una medida que en primer lugar afectaría las relaciones comerciales -ya afectadas- entre ambos países, no existen lineamientos en torno al cierre de las actividades consulares entre Caracas y Bogotá.
Esto quiere decir, de acuerdo con Panizza, que el distanciamiento entre Venezuela y Colombia lo sufrirán en mayor parte las poblaciones fronterizas que son las que experimentarán una repercusión más fuerte debido a los intensos lazos que existen en estas zonas.
¿En esta situación, cómo dialoga un país con el otro?
Panizza afirmó que los recursos de que dispone el Derecho Internacional involucran desde el punto de vista de manejo de los intereses de ambos países, la posibilidad de que éstos sean manejados a través de la embajada de un tercer país.
“Colombia y Venezuela son integrantes de UNASUR, por lo que en mi opinión, esta instancia puede ser la indicada, la natural, para servir de mediadora”, añadió.
Sin embargo, también existe la opción de que el líder de un tercer país como Brasil, Argentina o México puedan servir de intermediarios para conseguir un nuevo acercamiento entre las partes.
En el pasado, República Dominicana ha sido un país mediador entre Venezuela y Colombia y en esta oportunidad, Panamá y Brasil se han ofrecido a intentar mediar entre Caracas y Bogotá.
En el pasado, ya se habían registrado impasses diplomáticos entre Venezuela y Colombia. ¿Cuál es la diferencia esta vez?
Durante los últimos años, las relaciones entre Caracas y Bogotá han sufrido altibajos. En el año 2008, se desató una crisis que provocó el “congelamiento” de relaciones entre ambos países tras el ataque del ejército de Colombia a un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano, en el que murió el comandante guerrillero Raúl Reyes.
Luego de un acercamiento, las relaciones volvieron a enfriarse en 2009 luego que un acuerdo entre Colombia y Estados Unidos que autoriza a militares estadounidenses a operar en varias bases colombianas.
En 2010, a raíz de la campaña electoral también hubo desencuentros que ahora han culminado con el anuncio, por parte de Venezuela, de la ruptura de las relaciones diplomáticas con Colombia.
En este caso, según Francisco Panizza, la ruptura de relaciones diplomáticas anunciada marca el punto más bajo entre ambos países y es un indicativo de la implementación de la medida diplomática más extrema.
¿Qué pasa con el comercio entre ambos países?
Analistas coinciden en que en este aspecto, los efectos prácticos de la ruptura de relaciones entre Venezuela y Colombia son limitados.
Esto debido a que el intercambio comercial entre ambos países se encuentra reducido a su más mínima expresión.
Desde hace varios meses, Venezuela decidió encontrar sustitutos para los productos que importaba desde Colombia, luego de relaciones tensas entre ambos países y argumentos sobre precios y soberanía.
¿Cómo afecta a la gente? ¿Cómo se ve afectado el tránsito de personas?
En primer lugar, según Panizza, se pueden producir medidas oficiales vinculadas a la restricción de movimiento o intercambio de ciudadanos entre los dos países. Este escenario, expresó el académico, es poco probable, debido a los grandes vínculos que existen entre Venezuela y Colombia.
El académico señaló que en este tipo de escenarios también se podría registrar hostilidad entre las diferentes comunidades -toleradas o no por cualquiera de los gobiernos. Sin embargo, Panizza recordó que esto tampoco ha ocurrido hasta ahora y que en el pasado, las relaciones entre ciudadanos venezolanos y colombianos ha sido cordial, al margen de los desencuentros diplomáticos.
Sin embargo, en el caso de la ruptura, una solución práctica consiste en encargar a los consulados de los asuntos de interés, añadió.
¿Qué puede esperarse en el futuro?
Panizza recuerda que en poco tiempo habrá un cambio de gobierno en Colombia.
La juramentación de Francisco Santos como nuevo presidente de Colombia, siempre abre la posibilidad de que se reactive el diálogo directo.
De hecho, el presidente de Venezuela, avizoró esta posibilidad. “Ojalá Santos se inunde de espíritu latinoamericano y entienda que acá podemos convivir gobiernos de derecha e izquierda. A eso estamos obligados”, afirmó el mandatario venezolano.
Según Panizza, el momento en que se producen las denuncias podrían sugerir que se trata de una decisición del actual presidente de Colombia, Álvaro Uribe, para que le sea más difícil a Santos lograr un acercamiento con Venezuela.
“Aunque Santos es cercano a Uribe, no quiere decir que ambos piensen igual”, expresó. Además, las declaraciones sobre un “acercamiento” con Venezuela, hecha por el presidente electo de Colombia, podrían ser interpretadas como un cambio de política.