* Reitera Narro Céspedes su compromiso para construir una vida libre de violencia para niñas, niños y mujeres
Ciudad de México.- En el Senado continuamos en la lucha por la justicia a favor de las mujeres, legislamos para que se acabe la violencia vicaria y la violencia de género, así como para lograr, realmente, construir una vida libre de violencia para niñas, niños y mujeres, subrayó el senador José Narro Céspedes.
El legislador del Grupo Parlamentario de Morena manifestó que “no podemos ser impasibles, estar tranquilos cuando vemos que estas injusticias en contra de las mujeres continúan en el país con toda impunidad”.
En conferencia de prensa, refrendó su compromiso para continuar con acciones en favor de las mujeres y de una vida libre de violencia hacia este grupo poblacional, “porque no sólo estamos en el discurso, sino que atendemos, apoyamos y damos voz a las familias que enfrentan dicho entorno”.
El secretario de la Mesa Directiva hizo referencia sobre diversos casos de mujeres que padecen esta situación, y destacó que este tipo de violencia se utiliza en determinadas situaciones, como en los procesos de separación o divorcio, o cuando la mujer desea rehacer su vida con otra persona.
Por ello, dijo, es importante que a las víctimas se les oriente y atienda por parte de profesionales en materia psicológica, ya que cualquier tipo de agresión genera daños colaterales que provocan patrones de comportamiento en los que se replican los malos tratos en virtud de que se les crea un hábito.
Indicó que, aunque ya en algunos estados ya implementaron la lucha contra la violencia vicaria y ya se empieza a ver la luz de la justicia, aún hay muchos hechos de injusticia, dolor y agravios en contra de menores y mujeres.
“Hoy aquí ratificamos nuestro compromiso de continuar en esta batalla, la cual, no vamos a perder, porque el Estado mexicano y la justicia están de nuestro lado, porque luchamos por causas que merecen resolverse correctamente, aunque muchas autoridades como ministerios públicos y fiscalías no escuchan a los familiares de las víctimas”, apuntó.
Además, en representación de diversos colectivos de unión de madres protectoras, y de familiares de menores desparecidos o sustraídos, Frida Gómez exigió a las fiscalías de Morelos, de Guanajuato y del Estado de México para esclarecer el caso de violencia vicaria en contra de la joven “Dulce Gabriela”.
Aclaró que el primer feminicidio que se documentó de violencia vicaria fue en Quintana Roo, a partir de la aprobación de este tipo de agresión en la legislación, en la que se pudo acreditar cómo la agresión extrema puede llevar a las mujeres a morir.
Mencionó que el segundo caso de feminicidio vicario se documentó en el Estado de México, en el que se documentó un infanticidio y un feminicidio. “Estas dos vidas estarían aquí si las fiscalías hicieran su trabajo y no fueran omisas y si hubieran brindado medidas de protección y levantado las denuncias por sustracción y atendido al reclamo por violencia vicaria”, subrayó.