Oaxaca.- Mucho daño a causado el machismo y el feminismo por lo que nos conviene a todos defender la dignidad de toda persona, pero sobre todo de las mujeres dada la marginación violencia y falta de igualdad de oportunidad para superarse que por décadas ha sufrido en Oaxaca.
Lo anterior lo señaló el arzobispo de Antequera, José Luis Chávez Botello en rueda de prensa, efectuada en la catedral de Oaxaca en su mensaje dominical, con motivo de la celebración del Día del Mujer, el próximo 8 de marzo.
Sin embargo, reconoció que el machismo ha provocado mucho daño pero el feminismo lo hace cuando se sigue la revancha, de la superioridad, por que el hombre necesita de la mujer y la mujer del hombre en un plano de igualdad, “son complementarios”.
Estamos sufriendo el fruto de graves errores sociales y políticos, en el campo de la educación, de la familia y de la política en relación a la mujer.
“Es penoso reconocer que aun existen poblaciones donde la costumbre se ha convertido en un abuso, al negarle a la mujer el derecho al voto o a poseer tierra o a ejercer algún cargo”, agregó el jerarca de la iglesia católica en Oaxaca.
Aseguró que “el trabajo de la mujer suele ser mal remunerado y hay ambientes en los que por su condición soporta el hostigamiento sexual, para conservar el empleo, vemos con tristeza en muchas jóvenes el rostro de la injusticia, el abuso y del comercio sexual, el estrago de la drogadicción, de la prostitución y en algunas enroladas ya en el crimen organizado”.
Aseguró que la Iglesia católica siempre ha defendido la vida auténtica y dignidad de toda persona, “cualquier marginación, distorsión y atropello a su dignidad no va con la fe católica, va en contra del plan de Dios”, por lo que demandó que se actué con responsabilidad social.
Chávez Botello reconoció, que con el fenómeno de la migración ha dejado a cientos de mujeres asumir solas la responsabilidad de educar y a “veces de sostener a los hijos, hay que añadir las madres solteras que llevan toda la responsabilidad familiar y a las viudas que quedan con hijos pequeños; crece el número de mujeres que ante la difícil situación económica trabajan fuera de casa para apoyar la economía, con el consecuente desgaste limitaciones y riesgos”.
Explicó que no se trata de un simple malestar social, “se trata de un profundo problema social y humano, que ha dañado no solamente la justicia sino la misma dignidad humana”.
Lo que necesitamos es actuar con urgencia, “desde todas las instancias, sectores, comunidades y familiares, para impulsar juntos los derechos humanos, sociales y políticos, que como personas permitan a toda mujer superarse, una mayor participación en la construcción de nuestra sociedad, desde la mirada y actuación femenina, que dará integralidad, complementariedad, capaz de enriquecer transformar y humanizar los diferentes espacios”.
Aseguro el Arzobispo de Oaxaca que existe “grave rezago en impulsar la dignidad de la mujer, urge en hacer algo desde las leyes, se tome en cuenta los delitos, la procuración de la justicia que a las mujeres las ha dejado mal”
Por lo que se pronunció que es necesario que se creen fuentes de empleo más que pensar en crear zonas de tolerancia que no resuelven el problema de la explotación de la mujer por lo que insto que se actúe desde los ámbitos del poder judicial, legislativo y ejecutivo, pero también la sociedad que debe exigir que la mujer ya no esté en condiciones de vulnerabilidad