Entrelíneas

Miguel Ángel Schultz

Pocas veces un rector de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO) ha encabezado una manifestación, como sucedió ayer, cuando Eduardo Martínez Helmes, marchó al frente de cientos de universitarios hacia el Palacio Legislativo -ubicado en el municipio de San Raymundo Jalpan- para demandar un incremento al subsidio que entrega el Gobierno del Estado a la otrora Máxima Casa de Estudios de Oaxaca. La movilización fue convocada inicialmente por el Sindicato Universitario de Maestros (SUMA), para exigir un incremento del subsidio en un 50 por ciento; gremio que está bajo el control del rector y las circunstancias obligaron a las otras organizaciones sindicales, que existen dentro de la Universidad, a sumarse a la protesta.

Para dar un ejemplo de las desventajas presupuestarias, mientras el Sistema de Universidades Estatales de Oaxaca (SUNEO) recibe un gasto de anual de 110 mil pesos por estudiante, a la UABJO le destinan 36 mil pesos, lo que representa sólo el 32.7 por ciento de lo que invierte el gobierno en un alumno del SUNEO. En este año le destinaron 800 millones de pesos, de los cuales el gobierno de Gabino Cué puso 80 millones, menos de lo que ha invertido en el circo de la pista de hielo, en beneficio de unos cuantos “empresarios”, entre ellos Hugo Scherer.

La UABJO está sumida en un crisis permanente desde 1977, cuando estalló un movimiento popular, que sí derribó al entonces gobernador, Manuel Zárate Aquino, por lo que el Estado aplicó toda una estrategia hacia la Universidad, que no le ha permitido remontar esa crisis profunda, que la mantiene aletargada en lo académico, científico y sin un espíritu transformador. Por ello se le han impuesto desde precarios subsidios, hasta rectores a quienes no se les pide cuentas del uso de los dineros, ni de sus resultados en el ámbito del conocimiento. Las consecuencias saltan a la vista.

La Universidad está entrando en su proceso electoral interno, elección que se efectúa en los primeros días de mayo, que ahora empata con el proceso electoral estatal, lo que resulta una combinación explosiva, que no pasa desapercibido por los gobiernos estatal y federal, que deben encontrar los caminos para que la movilización universitaria, por un mayor subsidio se siga expresando en las calles. Demanda que ha tenido el poder de aglutinar a los diversos grupos que actúan en su interior, que en algunos casos son verdaderos clanes familiares, donde se encuentran desde los abuelos, que no se quieren jubilar, hasta los nietos que buscan mayores espacios, lo que enrarece la vida institucional de la UABJO.

La grey universitaria se ha caracterizado por su sensibilidad a las causas sociales, por lo que se ha visto implicada en el derrocamiento de los gobernadores Edmundo Manuel Sánchez Cano (1947); y Manuel Mayoral Heredia (1952). Así como el papel central que jugó en el 2006, baste recordar que fue en el Edificio Central de la UABJO donde se conformó la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y que Radio Universidad se convirtió en el bastión de la agitación de ese año. De ahí emergió Francisco Martínez Neri, ex diputado local y actual legislador y coordinador de la bancada legislativa federal del PRD.

La UABJO no ha sido de los afectos de Gabino Cué, quien como candidato a gobernador, por primera vez, en el 2004, puso como ejemplo de estudiantes burros a los universitarios. Apoyó la candidatura a la rectoría de Josefina Aranda Bezaury, en el 2011, proyecto que no cuajó. Todo ello explica en parte porque el Gobierno del Estado ha dado mayores apoyos al SUNEO, cuyo eje central es la Universidad de la Mixteca, que preside desde hace 24 años el español Modesto Seara Vázquez, que hasta el Palacio de Gobierno recibió en comodato.

El rector Martínez Helmes no ha sido un ejemplo de transparencia en el manejo de los recursos, ni está alejado de los grupos violentos con lo que controla la universidad, ni sus resultados académicos son ejemplares, pero ello no justifica que a la Máxima Casa de Estudios se le mantenga de rodillas, porque ahí estudian los hijos de los más jodidos de Oaxaca, que son muchos.

También hay que decir que Martínez Helmes forma parte del Consejo Político del Partido Morena con Francisco Wilfrido Mayrén Peláez y José Márquez Pérez, presidente del Patronato Pro Defensa y Conservación del Patrimonio Cultural y Natural del Estado de Oaxaca A.C. (PRO-OAX). Por lo visto también tiene su corazón que late por la presidencia municipal de Oaxaca o una curul.

@MiguelAschulz