En un mensaje a los oaxaqueños, anunció un decreto para el proceso de cambio de administración.
El gobernador Ulises Ruiz Ortiz defendió a su administración y a su partido, el PRI, de las críticas “politizadas” de sus opositores, y aclaró que su mandato termina el 30 de noviembre próximo, cuando iniciará la entrega-recepción de su gobierno.
Mediante un mensaje transmitido en todas las estaciones de radio de la capital y en el canal del estado, indicó que mediante un decreto publicado hoy por el Ejecutivo a su cargo, determinó los lineamientos para la entrega-recepción de su gobierno a iniciarse en el mes de noviembre.
“Frente a los embates que pretenden sembrar insidia entre los oaxaqueños ahora pretextando la entrega recepción, expreso mi mayor compromiso por cumplir con transparencia y rendición de cuentas, hasta el último día de mi gobierno”, dijo.
La declaración fue como respuesta al exhorto que Gabino Cué, gobernador electo, le hiciera el pasado lunes para iniciar la entrega-recepción de su gobierno.
“La responsabilidad del nuevo gobierno inicia a partir del 1 de diciembre del año en curso”, subrayó el gobernante.
A pesar que en recientes declaraciones el mandatario estatal rechazó reconocer el triunfo de Cué por las impugnaciones presentadas por su partido en la elección a gobernador, Ruiz Ortiz destacó en su mensaje de hoy la intención de “quienes pervierten el sentido democrático de la alternancia que decidieron los oaxaqueños”.
Asimismo, expresó su “orgullo de pertenecer al Partido Revolucionario Institucional (PRI), constructor de instituciones del México actual, del México que hoy se diluye en manos inexpertas y cuyos riesgos sociales, políticos, económicos y de seguridad se acrecientan”.
A pesar de la derrota del pasado 4 de julio, aclaró, “somos un partido triunfador y mayoritario, porque logramos obtener casi 600 mil votos, es decir, casi 300 mil por encima de la primera minoría que es el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y más de 300 mil arriba de la segunda minoría, el Partido Acción Nacional (PAN)”.
En ese sentido, destacó estar convencido de “que vale más perder honradamente que triunfar traicionando principios”.
Subrayó su “disposición al diálogo y a la comunicación política a la que obliga la civilidad y la mesura que hoy Oaxaca merece y nos demanda”.
El mensaje de tres cuartillas del jefe del Ejecutivo estatal defendió además temas como la transparencia en el uso de recursos públicos, justicia, obra pública y desarrollo económico.
“No tenemos nada qué ocultar”, destacó el mandatario al hablar sobre las 44 auditorías aplicadas durante su administración, el avance en la ejecución de obra pública, el acceso a la información y el crecimiento de su gobierno en relación a las administraciones de sus dos antecesores, Diódoro Carrasco y José Murat.