México DF.- Los integrantes de la Caravana Paso a Paso por la Paz solicitaron al Senado mexicano la eliminación de la visa para los centroamericanos; la desaparición del Instituto Nacional de Migración.

Asimismo se pronunciaron por el mejoramiento de la recién aprobada ley Migratoria; establecer un mecanismo regional para la búsqueda de los inmigrantes desaparecidos y la identificación de los restos de quienes mueren en su intento por llegar a Estados Unidos.

Al arribar a la ex sede del Senado, la Casona de Xiconténcatl, los manifestantes les exigieron a los legisladores que México deje de ser ya “un gendarme de los EU.

El sacerdote católico Alejandro Solalinde, director del Albergue Hermanos en el Camino, asentado en Ciudad Ixtepec, Oaxaca, pidió al Gobierno de México, ya no sea “agachón y deje de ser ojete” con los migrantes centroamericanos.

Por su parte Javier Sicilia, criticó que la ley reglamentaria a la Reforma Migratoria esté sujeta a la determinación burocrática del Presidente de la República, Felipe Calderón.

“A la chingada los trámites burocráticos cuando estos se colocan por encima del interés de los seres humanos. Hay que devolverles su dignidad a los hermanos centroamericanos”.

Se solicitó se retiren del aire los anuncios donde se afirma que los migrantes pueden transitar libremente por territorio nacional, ya que eso no acurre, al menos que cuenten con visa mexicana.

Los senadores que recibieron a la Caravana le dijeron que “el responsable de que no se cumpla con la libertad de tránsito sin visa durante 180 días como marca la Ley, es el presidente Felipe Calderón quien ha sido omiso en la elaboración de la ley reglamentaria para que eso surta efectos”.

Estuvieron presentes la senadora del Partido del Trabajo (PT), Rosario Ibarra; del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Yeidckol Polevnsky y Carlos Sotelo.
Por los integrantes de la Caravana estuvieron presentes Alejandro Solalinde y el poeta Javier Sicilia, que encabezaron un contingente de aproximadamente 600 personas, que fueron recibidas en el atrio de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México por el rector de la misma, Manuel Arellano Rangel.

El clérigo condenó las constantes violaciones a los derechos humanos que sufren los migrantes en su paso hacia el norte del continente ya que es una población, que calificó como extraordinariamente vulnerable.

La caravana Paso a Paso por la Paz es fue organizada por familiares de inmigrantes desaparecidos de varios países centroamericanos como El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de México reporta que cada año son raptados en México alrededor de 20 mil migrantes por delincuentes, que extorsionar a las familias o los enrola en las filas del crimen organizado, ofreciéndoles dinero y ayuda para hacerlos llegar a Estados Unidos.