Entrelíneas
Miguel Ángel Schultz
El fracaso de las corporaciones de seguridad pública y de impartición de justicia en Oaxaca quedó de manifiesto ayer, con los hechos atroces ocurridos en San Juan Bautista Tuxtepec, municipio de la región de la Cuenca del Papaloapan, cuando fueron acribilladas en las calles y a plena luz del día cinco personas, en acontecimientos que se iniciaron alrededor de las 07:00 horas y se prolongaron durante la mañana, lo que significa un baño de sangre por el fracaso de su gobierno.
Estos acontecimientos enmarcan los estertores del “gobierno del cambio” que encabeza Gabino Cué Monteagudo, quien emergió como la esperanza de un régimen democrático, que contó con el aliento de la inconformidad social, que estalló en junio del año 2006, cuando el entonces gobernador Ulises Ruiz Ortiz, realizó el fallido desalojo del plantón que la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) mantenía en el Zócalo de la ciudad de Oaxaca.
Ha sido tal el fracaso de la actual administración, que Cué Monteagudo se dedica de lleno a atender sus compromisos como presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO), más que gobernar Oaxaca, cuyo mandato concluye el próximo 30 de noviembre.
En un recuento del clima de inseguridad que prevalece en Oaxaca, también está el hecho violento ocurrido el lunes pasado en Tlacolula de Matamoros, distante a 32 kilómetros de la capital del estado, donde fueron asesinados en el interior de su domicilio, el matrimonio integrado por Alejandro Jiménez González, músico y empresario tortillero, y su esposa Carmen Araceli Méndez Ramírez, abogada y maestra de zumba.
Además, ayer martes en el municipio de Santa Lucia del Camino, fue “levantado” en el interior de su negocio el empresario tortillero, Jesús Alejandro López Ramírez, de 32 años de edad, al filo de la 16:00 horas, sin que se sepa hasta el momento de su paradero.
En la estratégica región del Istmo de Tehuantepec, de enero a la fecha se han registrado 113 crímenes, de los que se han cometido el 40 por ciento en Juchitán de Zaragoza, ya que son 41 asesinatos, según lo reconoce la Fiscalía General del Estado.
Entre esos asesinatos está el de Rolando Vázquez Castillejos, dirigente municipal del Partido de la Revolución Democrática (PRD) e integrante de la Coalición Obrero Campesina Estudiantil del Istmo (COCEI), ocurrido la noche del martes 16.
El crimen político del perredista se cometió pese a que el pasado 19 de abril autoridades de los gobiernos estatal, federal y municipal del llamado Grupo de Coordinación del Istmo en materia de seguridad anunciaron en Juchitán, el operativo bautizado como “Juchitán Seguro” para garantizar las condiciones de paz y tranquilidad en la zona.
En ese operativo participaron 300 elementos del Ejército Mexicano, la Marina-Armada de México, la Procuraduría General de la República, la Fiscalía General del Estado y las secretarías General de Gobierno y de Seguridad Pública de Oaxaca, pero lo único seguro con el operativo fue que los asesinatos continuaron, ante el total fracaso de los cuerpos de seguridad.
Ante el reclamo de los perredistas, que hasta antes del asesinato de su correligionario, Vázquez Castillejos, permanecieron al margen de la creciente inseguridad, el gobierno de Cué Monteagudo, que no ha fijado ninguna postura ante estos hechos de violencia, el Fiscal General del Estado, Héctor Joaquín Carrillo Ruiz, el jueves 18 dio a conocer de nueva cuenta un operativo especial para indagar dichos crímenes, con la participación de 50 policías especializados y peritos en distintas ramas, cuyos resultados hasta el momento son nulos.
La descomposición de la actual administración gubernamental es patente, porque la inseguridad no sólo se registra en la región de la Cuenca del Papaloapan o en el Istmo de Tehuantepec, sino también en la Mixteca, Valles Centrales y la Costa, todo ello independientemente del grave conflicto magisterial que sigue costando vidas humanas y llevando a la bancarrota la economía de Oaxaca, por los cierres carreteros y de comercios de la Sección 22 del SNTE, mientras Cué Monteagudo sólo tiene tiempo para presidir la CONAGO, sumiendo a Oaxaca en el desgobierno.
@MiguelAschulz
