Oaxaca de Juárez, Oaxaca.- La onicofagia es el hábito de comerse las uñas, generalmente de los dedos de las manos. Se trata de una manía emocional y conductual, que de no tratarse puede traer consigo una serie de repercusiones para nuestra salud, señaló la coordinadora de Prevención y Atención a la Salud del IMSS, Perla Vázquez Altamirano.
La funcionaria del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) agregó que este hábito tiende a presentarse desde la niñez como una forma de expresar ansiedad. Con los años, esta manía se hace algo habitual que permanece y se lleva a cabo de manera automática. Lo que muchas personas no saben es que esta manía provoca efectos negativos a nuestra salud.
“En primer lugar hay que tener presente que la estructura de las uñas y el crecimiento de las mismas se ve afectado por el hecho de ser mordidas, ya que al morder generamos en la uña micro roturas que la obligarán a crecer de manera desigual, a capas, sin cubrir toda la superficie de la carne”, añadió.
Indicó que “mantenerlas demasiado cortas puede provocar dolores al tomar objetos, por otro lado, debemos tener en cuenta que morderse las uñas tiene un efecto en los dientes, ya que estamos constantemente golpeando unos con otros a la hora de realizar el movimiento de mordida”.
Esto lo que hace es aumentar el desgaste de la zona y la sensibilidad de las piezas dentales al perder parte del esmalte que los recubre, finalmente y no menos importante, son la trasmisión de bacterias y hongos por vía oral, ya que las uñas son un foco activo de estos microorganismos, apuntó Vázquez Altamirano.
Al pasar este tipo de organismos, abundó, puede desencadenar una infección en la mucosa de la boca que deriva en una serie de problemas y molestias, por lo que recomendó evitar este mal hábito y estar conscientes de los beneficios que se obtienen al implementar actos de higiene básicos como el lavado de manos y uñas con agua y jabón que es una de las maneras más efectivas y económicas de prevenir enfermedades diarreicas y respiratorias.