Por Libre Pensador
*Puente de plata de los priistas a Calderón
*Sobre el cadáver de un padre que buscaba a su hijo el gobernador panista de Sonora le siembra presuntos antecedentes penales
* Es la guerra sucia que alcanza a Humberto Moreira
El PRI ha decidido poner un puente de plata al presidente Felipe Calderón para buscar que la sucesión presidencial del 2012 se realice sin brincos ni azotes y en forma pacífica, dado que el PAN en el gobierno en Sonora, del mandatario Guillermo Padrés Elías, recurre a vías tan peligrosas y sucias como criminalizar a un padre asesinado que buscaba a su hijo. Padrés mismo no escondió su tentativa de usar el cadáver de Nepomuceno Moreno Muñoz para desnaturalizar a las víctimas y la lucha de los críticos de su estrategia de guerra contra el crimen organizado.
En Durango, donde el presidente Felipe Calderón hizo un balance de la terrible sequía que azota al norte del país, dos gobernadores priistas, Miguel Alonso y César Duarte, lo elogiaron. Alonso le dijo que ha tenido seis (sic) años de una “conducción patriótica” y le auguró que el último año será el exitoso.
De su lado, Duarte le recordó que hace cinco años “a estas horas estábamos escribiendo historia. Estaba llegando usted a la Presidencia de México y ha hecho, sin duda, una labor heroica y extraordinaria”, pero en el Senado la fracción priista, a través del senador Francisco Arroyo, le dicen un no a la administración federal panista de “criminalizar lucha social que nos devuelve a las aciagas épocas del delito de disolución social” que perseguía a los opositores políticos durante la etapa anticomunista del gobierno mexicano.
Padrés se asume como ejecutor de venganzas del gobierno de Calderón que el propio secretario de Gobernación, Alejandro Poiré parece desmentirlo, pero a medias. En un comunicado, la secretaría de Gobernación el Gobierno Federal “reprueba el tratamiento público de este caso donde se criminaliza a las víctimas de la violencia” pero no pone en duda los supuestos antecedentes penales de Nepomuceno.
Es muy difícil creerles cuando están los penosos casos de los estudiantes Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo, del Tecnológico de Monterrey cuyos cadáveres fueron criminalizados. Fueron señalados como sicarios por el ejército en marzo de 2010. Hoy el gobernador panista Padrés, cuyo triunfo en Sonora se debe a la tragedia de los niños también asesinados de la ABC por indolencia de funcionarios estatales y del IMSS, recurre al mismo sucio expediente.
La ira se apoderó de Los Pinos al grado de que en su boletín de respuesta a la denuncia por crímenes de lesa humanidad ante el Tribunal de la Haya, cometieron errores en su redacción: en lugar de decir “y defender a la familia contra los criminales”, escribieron: “y defender a las familias de los criminales”. A quién defienden: ¿A las familias o a las familias de los criminales? Algo pasa por Los Pinos cuando los redactores han perdido la cabeza y el temple para revisar los comunicados oficiales de la Presidencia de la República.
Con recurso fácil de criminalizar a los luchadores sociales, se demuestra un gobierno con reiteradas muestras de un profundo desprecio por la vida. La incapacidad para controlar y detener la ola de violencia criminal en el país se disfraza de acusaciones a las víctimas. A los dos estudiantes del Tecnológico de Monterrey asesinados ya los habían acusado de ser parte del grupo de sicarios que se enfrentó al ejército en los terrenos de esa institución privada de educación superior.
En marzo de 2010, los estudiantes Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo fueron masacrados al grado de que sus cuerpos no fueron mostrados a sus familiares. Los dos estudiantes eran alumnos de excelencia. ¿Por qué creerle ahora al gobierno Guillermo Padrés Elías cuando acusa a un hombre muerto de tener antecedentes penales y sonríe cuando dice que se reserva otras líneas de investigación? ¿Por qué creerle al gobierno del presidente Calderón cuando se defiende airadamente de una denuncia que difícilmente puede tener éxito en los tribunales de La Haya?
Sólo falta que al poeta Javier Sicilia se le acuse de alguna otra siembra de infamias. No les faltó la tentación de hacerlo sobre su hijo asesinado. No se equivocan en el PRI cuando ven el peligroso escenario de que el gobierno recurra a la siembra de dudosas pruebas para responder a las críticas. Bueno, presunto culpable o no, ¿no se les sembraron expedientes de Hacienda a Moreira en el Reforma? Es pregunta.
Tampoco se equivocan en el PRD cuando se dos fuerzas antagónicas y rijosas encabezadas por Marcelo Ebrard y Manuel López Obrador liman sus diferencias y buscan una unidad de los chuchos, Jesús Ortega y Jesús Zambrano, en aras de un propósito superior ante un gobierno que no escucha, no ve y sólo tiene como estrategia una guerra que arrastra al país hacia conflictos mayores sin resolver el de la violencia delictiva. Sus reyertas personales, enconos en los grupos de Morena contra Ebrard y los chuchos, son las menos importantes cuando está de por medio la estabilidad de la nación.
En ningún momento de la vida contemporánea de México, los riesgos de una desestabilización nacional habían estado tocando las puertas del país como ahora en el último año del gobierno de Acción Nacional en Los Pinos. Los riesgos son muy altos y los costos pueden ser mayores al número de víctimas de la guerra al crimen organizado, si la senda del país continúa con la siembra de infamias a militantes sociales y políticos de oposición. Nadie está a salvo y eso lo saben Peña Nieto y López Obrador. Sólo hay que ver los rostros del presidente Calderón y de su candidato Ernesto Cordero descompuestos por la ira.
La cadena de televisión norteamericana CNN señaló en marzo pasado, al cumplirse un año del asesinato de estos dos estudiantes del Tec, que a sus cuerpos “los militares de la Unidad Néctar Urbano 4 les colocaron armas de grueso calibre para hacerlos pasar como delincuentes y manipularon la escena del crimen”, según informó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en su recomendación 045/2010.
“En la madrugada del 19 de marzo de 2010, los cuerpos de los dos estudiantes yacían frente a una de las entradas del Campus Monterrey, tras un enfrentamiento entre militares y presuntos miembros de la delincuencia organizada”, citó CNN.
Al cuerpo de Nepomuceno Moreno Muñoz bien le pudieron haber sembrado un expediente de acusaciones, ahora que fue arteramente asesinado después de haber denunciado ante el propio Felipe Calderón, durante una reunión en el Castillo de Chapultepec con el movimiento de Javier Sicilia, de la desaparición de su hijo Jorge Mario de 18 años, presuntamente por policías involucrados con el crimen organizado.
Si son capaces de este tipo de infamias, los gobiernos de Acción Nacional pueden llegar a extremos mayores y perturbadores para la vida del país. Eso lo saben en el PRI, por eso no dan paso sin huarache cuando Carlos Salinas, Emilio Chauyffet, Enrique Peña Nieto y los gobernadores de Zacatecas y Chihuahua, Miguel Alonso y César Duarte, defienden a Calderón de la demanda presentada en La Haya, ya que saben de los riegos que corre la Nación si se sigue la misma ruta de descomposición de las estructuras gubernamentales de justicia y de las fuerzas armadas.
Es cierto que los priistas tienen cola que les pisen, a Carlos Salinas el líder moral Cuauhtémoc Cárdenas lo acusa de los asesinatos de militantes del PRD durante el salinato; a Emilio Chaufett y a Ernesto Zedillo, se les señala sobre de los crímenes de Acteal , y a Enrique Peña Nieto de los abusos de la policía mexiquense en Atenco. O sea nadie se salva, pero no hay paralelo con los más de 50 mil asesinatos, sean en confrontaciones armadas o por los llamados eufemísticamente por “daños colaterales”, en el sexenio de Acción Nacional del presidente Calderón.
¿Por qué no señalaron a Nepomuceno cuando estaba en vida? El gobernador Padrés descubrió un hecho insólito: Nepomuceno era un ser humano ahora que está muerto “independientemente de cuáles sean sus antecedentes” y recomendó a los reporteros locales de Hermosillo cuidarse de sus amistades, “Cuídense, cuídense,” le decía insistentemente el gobernador a los reporteros en tono de una sonriente amenaza durante la entrevista video grabada con el mandatario difundida por El Imparcial.
Pietro Ameglio, miembro del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, no se anduvo por las ramas al señalar el carácter fascista del gobierno de Sonora al sacar una acusación contra Nepomuceno que “resultó falsa” y acusar al gobierno de Padrés de negarse a brindar auxilio al activista asesinado y dedicarse a criminalizar la lucha social de los activistas de Sonora.
Para Javier Sicilia el alevoso crimen fue exactamente similar al de la señora Marisela Escobedo asesinada el 16 de diciembre de 2010 a las puertas del gobierno estatal de Sonora. “Lo terrible del acontecimiento es que fue la crónica de un asesinato anunciado como el de Marisela”, dijo el poeta en Guadalajara.
El senador René Arce, muy cercano a los chuchos, ahora miembro del Partido Verde, prevé que la denuncia presentada en la Haya no será la única, están vivos los expedientes de los crímenes de los migrantes centroamericanos a los cuales el gobierno por omisión, incapacidad, abulia no protegió.
También están los escandalosos casos de los niños Bryan y Martín Almanza, de cinco y nueve años de edad, muertos por militares cuando su familia viajaba el pasado 4 de abril de 2010 sobre la carretera nacional Nuevo Laredo-Reynosa-Matamoros. Los militares abrieron fuego con armas de grueso calibre y lanzaron granadas de fragmentación contra una camioneta donde viajaban 13 familiares, entre ellos 7 infantes. El ataque dejó un saldo de dos niños muertos y dos adultos heridos graves. La familia se dirigía a la playa de Matamoros para celebrar el “Día de la Coneja”. En el ataque de los militares fueron heridos Martín Almanza Rodríguez, de 30 años, padre de los menores y su tío Carlos Alfredo Rangel Delgado.
El PAN no la tiene fácil en la carrera por la sucesión presidencial. Su precandidata más popular Josefina Vázquez Mota apenas logró reunir unos 800 militantes y simpatizantes de su partido en una reunión efectuada en el Centro de Convenciones del Sindicato del Seguro Social en calzada de Tlalpan, el martes pasado. Ernesto Cordero no la levanta ni con la ayuda de dios padre en Los Pinos. Da terror que llegue a ser candidato presidencial. El desgaste de los precandidatos panistas, Josefina, Ernesto y Santiago, con todo y los recursos que tendrán para su precampaña, será dramático.
En el mes de enero, den gracias a la Guadalupe si logran un grado de popularidad y consenso público alguno de ellos o ella. De Josefina temen que de un obligado giro político y se lance aprovechando que las mujeres panistas en su mayoría están con ella en una acción semejante al Calderón desobediente de hace seis años. El apoyo de las mujeres panistas, que son muchas, es decisivo para su candidatura.
De Creel no se preocupan en el PAN, es a Josefina a quien le tienen completa desconfianza, pero cada vez son más los panistas que ven en ella la única opción cuando ven el avance de Peña Nieto y el crecimiento de López Obrador.
A estas alturas, la única fuente de protección para el gobierno de Acción Nacional es la que le ofrece el PRI de Peña Nieto, quien ya sacrificó a Humberto Moreira y le ofreció aparentemente su cabeza para su sacrificio público a los panistas que reclaman que sea procesado penalmente, mientras el unificado PRD difícilmente se lo daría.
La unidad al interior del PRD tiene un precio: la ruptura de Marcelo y de los chuchos de sus alianzas con el panismo. Para el CEN del PAN en su sede de Gabriel Mancera y Popocatépetl, en la del Valle de la capital, no es buen augurio quedarse solos para la contienda del 2012.
Sobre todo ahora que Lujambio saca a yerno de Elba Esther de la SEP, dice la cabeza de El Universal. Termina así el concubinato político de la maestra con el gobierno de Calderón.
No hay más Elba Esther está con Peña Nieto y con el PRI. Su yerno Fernando González como subsecretario de Educación Básica, era la clave de esa alianza entre el SNTE y el PAN. Las piezas de la política de la maestra Gordillo se vuelven acomodar a su antigua posición, aunque a Francisco Labastida y a María de los Ángeles Moreno les cuesta asimilarlo. No hay mal que por bien no venga, reza el popular refrán.
Extraño sacrificio de Moreira. O los priistas tienen la piel muy delgada ante los medios o es una concesión para que se lo coman los leones en el circo romano de San Lázaro. No tienen la piel de Cristina Fernández y su difundo esposo Nestor Kirchner que aguantaron toda la raja que les lanzó el poderoso periódico El Clarín que les lanzó una campaña con todo contra la pareja presidencial argentina, y el gobierno les respondió con auditorías fiscales y una investigación sobre el origen de los hijos de la dueña de ese periódico.
Aquí el Reforma- que quién sabe si por obra del espíritu santo o por orden de un desesperado que anda en campaña les cayó el expediente del endeudamiento de los 33 mil millones de pesos de Moreira, que puso en jaque al PRI de Peña Nieto, y le ceden la cabeza del dirigente que recuperó Michoacán, haiga sido como haiga sido.
Habrá que saber por qué la presidenta Cristina Fernández, como estrategia, jamás cedió ante las presiones de los medios, cero entrevistas, cero concesiones y centró su campaña en sus electores, quienes fueron las que la llevaron a la reelección. Aquí con el Reforma chillan y se cuelgan de las lámparas, cuando se sabe en el medio de dónde viene el periodismo de investigación política de la familia Junco. ¡Viva la libertad de prensa!
La sorpresa es la de Manuel Bartlett Díaz, secretario de Gobernación durante el gobierno de Miguel de la Madrid, y a quien le tocó la caída del sistema en 1988, ahora invitado a ser candidato a senador por Manuel López Obrador. Así es la política en México, de reacomodos, no de maromeros ni de trapecistas, como se les decía antes. “La política es así”, decía un viejo columnista político, es el arte de enjuagarse las manos. Y ya, listo para la otra, a cambiar de traje.