Eloy Pacheco/www.voz21.mx
Jalapa de Díaz, Oax. Pasados ya 8 días desde aquella mañana 2 de octubre, cargando en sus brazos al pequeño Sabino Salvador, la valiente madre Irma López Aurelio manifiesta su enojo contra las autoridades de salud de Oaxaca y afirma: parí como un animal, sola, pude haber muerto ahí, es triste.
En su mirada se percibe la molestia derivada por las condiciones en que dio a luz a su bebé, el tercero de la familia, “y todavía me amenazan con que me van a quitar Oportunidades porque estoy hablando, pero si yo solo estoy diciendo la verdad pues, es todo lo que yo digo”.
Acompañada de su esposo Margarito Andrés Velásquez, tras salir del mismo Centro de Salud Rural donde no le brindaron la atención aquel 2 de octubre que no olvidará, ahora para la aplicación de las primeras vacunas al niño cuya imagen ha recorrido el mundo, Irma López dice que no guardará silencio, porque gracias a toda esta difusión está siendo atendida, además servirá para que en adelante sus paisanas no tengan que vivir historias similares.
“Yo sola sentí el dolor, nadie me ayudó. Salió la cabeza de mi bebé y apreté mi barriga para que saliera todo, así nació mi bebé”, afirma
“Cuando ya había salido y estaba tirado en el suelo es que llegaron a levantarme, pero antes de eso, no me atendieron, la enfermera Juliana solo me dijo que no había doctor y que esperara afuera. Desde temprano llegué para que me atendieran pero no fue así y tuve que parir yo sola, nadie me ayudó”, concluye.
Irma llamará a su bebé Sabino Salvador, Sabino por el nombre del abuelo materno y Salvador porque su nacimiento ha venido a salvar a muchas mujeres de vivir la misma historia de su madre, porque a raíz de esto las autoridades de salud de Oaxaca ya están tomando cartas en el asunto, de entrada ya enviaron tres médicos para mejorar los servicios en el Centro de Salud Rural.
