El medio de prensa de mayor distribución en la fronteriza Ciudad Juárez publicó en su editorial del domingo un mensaje dirigido a los diferentes grupos que se disputan el control por el tráfico de las drogas en la zona pidiéndoles una tregua.
El Diario de Ciudad Juárez pidió a los grupos del narcotráfico que expliquen exactamente qué información es la que quieren hacer llegar a la comunidad en general. A cambio, piden que no se ataque más a sus reporteros o sus instalaciones. ”Señores de las diferentes organizaciones que se disputan la plaza de Ciudad Juárez: la pérdida de dos reporteros de esta casa editora en menos de dos años representa un quebranto irreparable para todos los que laboramos aquí y, en particular, para sus familias”, señaló.
”Ustedes son, en estos momentos, las autoridades de facto en esta ciudad, porque los mandos instituidos legalmente no han podido hacer nada para impedir que nuestros compañeros sigan cayendo, a pesar de que reiteradamente se los hemos exigido”, afirmó.
La semana pasada dos de los reporteros gráficos del diario fueron atacados y uno de ellos, Luis Carlos Santiago Orozco, perdió la vida.
En el 2008, un reportero que cubría la información policiaca, Armando Rodríguez, fue muerto frente a su casa. Al año siguiente, el agente federal que investigaba el ataque a Rodríguez fue asesinado.
”Somos comunicadores, no adivinos. Por tanto, como trabajadores de la información queremos que nos expliquen qué es lo que quieren de nosotros, qué es lo que pretenden que publiquemos o dejemos de publicar, para saber a qué atenernos”, señaló el editorial.
El director general del periódico Pedro Torres Estrada dijo el domingo a la AP que existe una gran rabia, impotencia y desolación después de haber enterrado a Orozco.
”Lo que queremos es que no nos sigan usando como carne de cañón, en esta guerra, porque estamos hartos”, declaró en entrevista telefónica.
”Es una apertura para que ellos digan en determinado momento qué pudieran tener contra nosotros y qué quieren que hagamos… La convocatoria está abierta a quién responda, así sean narcos o gobierno”, señaló.
Torres dijo que espera una respuesta en los próximos días y entonces decidirán qué hacer y si lo harán público.
La determinación de publicar el editorial se tomó en conjunto con los directivos de la casa editora y el Consejo Consultivo, no así con los reporteros y editores que trabajan de manera directa con la información.
El editorial afirmó que no se trata de una ”rendición” o que hayan ”claudicado al trabajo”, sino una tregua.
”Ya no queremos más muertos. Ya no queremos más heridos ni tampoco más intimidaciones. Es imposible ejercer nuestra función en estas condiciones. Indíquenos, por tanto, qué esperan de nosotros como medio”, expresó.
Al menos 22 periodistas mexicanos han sido asesinados en los últimos cuatro años, al menos siete han desaparecido y más han huido del país según un informe publicado recientemente por el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), con sede en Nueva York.
La violencia del crimen organizado repuntó con fuerza desde diciembre del 2006, cuando el presidente Felipe Calderón fortaleció el combate a los carteles del narcotráfico con el despliegue de decenas de miles de soldados y policías federales en varias partes del país y ha costado más de 28.000 vidas.
Ciudad Juárez, al otro lado de la ciudad de El Paso en el estado de Texas, ha sido convertida en una de las ciudades con más muertes violentas en el mundo en medio de una lucha de dos años entre los carteles de Juárez y Sinaloa, según autoridades.
Más de 4 mil personas han sido muertas en la ciudad de 1.3 millones de habitantes en esos dos años.
