Chihuahua.- El Diario de Juárez informa que Juan Manuel Frayre, uno de los dos hijos de la activista Marisela Escobedo, se encuentra detenido en El Paso en busca de asilo político de EU.

Aseguró haber sido amenazado junto con su familia en el funeral de su madre, decidieron abandonar territorio mexicano luego del secuestro y asesinato en Ciudad Juárez de José Manuel Monge, cuñado de Marisela Escobedo, dos días después de asesinada (a las puertas del palacio de gobierno de Chihuahua).

Dijo que el principal temor era que los mismos elementos de la Fiscalía del estado, que fueron asignados para proteger la integridad de la familia, actuaran de manera contraria y les hicieran daño.

“Nosotros pensábamos que en cualquier momento nos podían hacer algo los mismos que estaban asignados para protegernos”, mencionó Frayre Escobedo, ataviado con el uniforme de recluso y detrás de un cristal de protección en el Centro de Detención de El Paso.

Aseguró que tanto él como su hermano Alejandro, ambos recluidos desde el 19 de diciembre en esta ciudad, sabían que por ser mexicanos y carecer de documentos de estancia legal en Estados Unidos, iban a ser arrestados por las autoridades migratorias.

“Aquí pasamos la Navidad y vamos a pasar el Año Nuevo”, mencionó.

En un principio se publicó que Juan Manuel era el único que se encontraba recluido en El Paso, pero ayer él confirmó a este medio que son los dos hermanos los que están detenidos.

Según las leyes de migración de Estados Unidos, cualquier extranjero que al internarse a territorio estadounidense diga a las autoridades que quiere refugiarse o asilarse porque teme por su vida en su país, debe ser recluido en un centro migratorio.

Los dos hijos de Marisela Escobedo, asesinada cuando se manifestaba frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, se encuentran a disposición del ICE (Aplicación de Leyes Aduanales y Migratorias) en El Paso debido a que han solicitado asilo político en este país.

Tres días antes de que Juan Manuel solicitara protección en Estados Unidos, su madre fue ejecutada en la capital chihuahuense, luego de exigir por más de un año el castigo legal para el homicida de su hija Rubí, asesinada en julio del 2009.

“Se están haciendo pendejos”, agregó Juan Manuel. “Ahora me enteré que el gobernador está ofreciendo 500 mil pesos para dar con el asesino, cuando mi mamá les dio todos los datos y documentos sobre el otro asesino… sobre Sergio Barraza, y no hicieron nada. Por favor, eso es una burla”.

El gobierno de Chihuahua elevó el monto de la recompensa de 200 mil a 500 mil pesos a quien ayude en la captura del autor intelectual del caso de Marisela Escobedo.

Asimismo, el gobernador César Duarte pidió la colaboración de la Interpol para localizar tanto al autor material de la ejecución de la activista como a Sergio Barraza Bocanegra, asesino prófugo y ex pareja de su hija Rubí Frayre Escobedo, cuyo cadáver apareció calcinado y mutilado en un tiradero el 18 de junio de 2009.

De acuerdo con recuentos periodísticos, Marisela Escobedo Ortiz mantuvo una cruzada para que se detuviera a Barraza Bocanegra, quien en primera instancia judicial fue declarado no culpable del homicidio de la mujer con quien procreó una hija.

Después, gracias a los reclamos de justicia de Marisela, fue encontrado culpable, pero para entonces había abandonado Ciudad Juárez.

Escobedo ‘persiguió’ infructuosamente a Barraza por varios estados de México esperando que fuera capturado.

El 16 de diciembre un sicario quitó la vida a la activista social frente al Palacio de Gobierno Estatal de Chihuahua.

Dos días después en Juárez fue incendiada la maderería de la pareja sentimental de Marisela, José Monje Amparán, cuyo hermano Manuel fue secuestrado en el mismo incidente y horas más tarde asesinado luego de ser aparentemente torturado.