Entrelíneas
Miguel Ángel Schultz
Por si algo le faltara a Oaxaca para acrecentar su mala imagen a nivel nacional, ayer se registró uno de los más violentos enfrentamientos entre dos organizaciones sociales, la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y el Frente Popular 14 de Junio, ambas pertenecientes al Partido Revolucionario Institucional (PRI). Hecho ocurrido en la agencia de Pueblo Nuevo y Viguera, al poniente de la ciudad de Oaxaca de Juárez, alrededor de las cinco de la tarde y que se prolongó hasta las ocho de la noche.
Estas gremiales vienen actuando en total impunidad, con una violencia desmedida alentadas por los gobiernos del Municipio de Oaxaca de Juárez y del Estado, que les brinda protección al dejarlas actuar en la ilegalidad. Además de proporcionarles concesiones, condonarles infracciones por la violación de los reglamentos de tránsito y permitirles arremeter contra la ciudadanía.
Hechos que nos hablan de la ingobernabilidad que existe en Oaxaca, donde el Gobierno del Estado que preside Gabino Cué Monteagudo, el llamado “gobierno del cambio”, ha dado origen a un estado fallido, sino cómo explicar que a pesar de la presencia de cientos o miles de policías federales, estatales y del municipio de Oaxaca de Juárez, que preside Javier Villacaña Jiménez, jamás intervinieron aplicando los principios caciquiles de gobernar de “mátense entre ustedes y con el que quede vivo arreglo”.
En esta confrontación se escucharon detonaciones de armas de fuego, que dejó un saldo de una persona asesinada, que de acuerdo a las primeras versiones respondía al nombre de Homero NN y que era originario de la Zaachila, conductor de un auto de transporte colectivo del municipio de Cuilapan, perteneciente a la agrupación del Frente Popular 14 de Junio, que se ha se ha distinguido por la violencia extrema con la que actúa.
Asimismo, hubo varias personas lesionadas, dos de ellas que tuvieron que ser llevadas a recibir médica, tres mototaxis y un taxi de los llamados colectivos quemados. Las primeras versiones señalan que el taxi de la ruta de Cuilapan del sitio Virgen del Tepeyac con placas de Oaxaca 6449-SJF y número económico 11445, chocó con uno de la zona de Viguera, lo que desató el conflicto.
Este tipo de violencia no es cosa menor, nos deja mal parados como destino turístico, más aún como están las protestas radicales de los integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), porque hay que recordar que, el Departamento de Estado de Estados Unidos, emitió una alerta de viaje en el mes de enero, alertando a sus connacionales tomar precauciones para viajar Oaxaca: Huatulco, Puerto Escondido y la ciudad de Oaxaca, por actos de delincuencia que se registran, en estos lugares.
Por si fuera poco, el pasado 21 de junio, la Embajada de Estados Unidos en México emitió un mensaje de seguridad, en el que advierten a sus empleados que pueden viajar a los puertos turísticos de Huatulco y Puerto Escondido, siempre y cuando lo hagan vía aérea. Les sugiere evitar las protestas en Oaxaca ya que “incluso las manifestaciones pacíficas pueden volverse violentas”. El mensaje fue enviado luego de la masacre de Nochixtlán, del pasado 19 de junio.
Ahora con los hechos violentos de ayer, hacen ver que cualquiera pude ser agredido impunemente, por un accidente de tránsito con un mototaxista, que no respeta ninguna norma de tránsito; que transitan por las carreteras, que lo tienen prohibido y que se apropian de calles para establecer sus sitios con la total complacencia del titular de la Secretaría de Vialidad y Transporte, Carlos Moreno Alcántara, por cierto del Partido Acción Nacional (PAN).
Es tal la complicidad, que el funcionario se ha negado a informar el número de concesiones del transporte público entregadas en la presente administración del cambio, pese a la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública, por lo que el Consejo General del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Oaxaca (IAIP), resolvió el recurso de revisión a favor de ciudadanos inconformes porque se les han negado darles dicha información solicitada.
En marzo del año 2014 con bombo, cohetones y platillos, Comunicación Social del Gobierno del Estado anunció que el Gobierno del Estado recuperaba -como le encanta decir en un hecho histórico y sin precedentes- la rectoría del transporte público con la Ley de Transporte, que entró en vigencia el 9 de marzo de ese año y sólo hay que ver lo que está pasando, por lo que dicha ley nació muerta.
Pero los acontecimientos de ayer son graves, dado que el enfrentamiento se desató por un accidente de tránsito, que originó tanta violencia, lo que además no es nuevo. Vemos: el viernes 19 de agosto mototaxistas agredieron violentamente a una conductora que intentó pasar el bloqueo que habían instalado en la rotonda a Benito Juárez, en Santa Cruz Xoxocotlán, por lo que fue bajada de su auto, golpeada sin misericordia, hasta dejarla inconsciente, por lo que tuvo que ser llevada por una ambulancia para que recibiera atención médica.
Asimismo, un estudiante de la Universidad la Salle tuvo un percance con un mototaxista al arrollarlo, en la entrada del recinto universitario, que han convertido en sitio, por lo que llegaron mototaxistas para destrozar el automóvil, lesionar a varios universitarios y a un guardia del plantel.
Antes, en el mes de abril, también por un incidente de tránsito en la ex Garita de Xoxocotlán, el repartidor de la carnicería Emily, fue perseguido, alcanzado, golpeado salvajemente y su motocicleta quemada; fue perseguido hasta la negociación, donde se refugió, por lo que fue apedreado el local comercial. Sin que intervinieran las autoridades.
No cabe duda que estando las cosas como están en Oaxaca, debido a la ingobernabilidad que existe, podemos decir que siempre al perro más flaco es al que se le suben más las pulgas y volvimos a ser noticia nacional.
@MiguelAschulz
