* La secretaria de Cultura del Gobierno de México inaugura Grabadoras de historias: Mujeres en la gráfica de los pueblos de México en el Munae
* Claudia Curiel de Icaza celebró que la muestra marque un hito: “Nos muestra el tipo de museos que queremos seguir construyendo en México”
* En el marco del Año de la Mujer Indígena, la exposición se conforma por más de 200 piezas, creadas por más de 140 artistas y maestras artesanas, con técnicas tradicionales, instalaciones, stencil, grabado monumental, bordado y cerámica
* La muestra visibiliza la presencia y producción artística de mujeres de diversas comunidades de México
Ciudad de México.- La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través del Museo Nacional de la Estampa (Munae), inauguraron, hoy miércoles 10 de diciembre de 2025, la exposición Grabadoras de Historias: mujeres en la gráfica de los pueblos de México.
Enmarcada en el Año de la Mujer Indígena y compuesta por más de 200 piezas –creadas por más de 140 artistas y maestras artesanas–, la muestra visibiliza la presencia y producción artística de mujeres de diversas comunidades de México, como la afrodescendiente, Comcaac, Maya, Mazateca, Mazahua, Náhuatl, Otomí, Purépecha, Totonaca, Tseltal, Tsotsil, Yaqui y Zapoteca.
Al inaugurar la muestra, la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Claudia Curiel de Icaza, celebró que se trate de un hito sin precedentes al ser la primera exhibición colectiva realizada por mujeres artistas de pueblos originarios que ocupa en su totalidad un museo nacional.
“Esta exposición nos muestra el tipo de museos que queremos seguir construyendo en México: museos que se abren al país y dialogan con talleres comunitarios, casas de cultura y colectivos, y no solo con los circuitos tradicionales del arte”.
“Museos que entienden la cultura como un derecho, como justicia social y no como un privilegio para unos cuantos. Museos que aportan a la cultura de paz porque ayudan a nombrar las violencias, a sanar la memoria y a fortalecer el vínculo con los territorios”, agregó Curiel de Icaza.
La exposición forma parte de las actividades de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, en el marco del 2025 Año de la Mujer Indígena; iniciativa transversal de la política cultural del país, afirmó ante Marina Núñez Bespalova, subsecretaria de Desarrollo Cultural; Alejandra de la Paz Nájera, directora General del Inbal; Emilio Payán, director del Munae y Rosie Huaroco, representante del equipo curatorial; así como de las artistas que participaron en la exposición.
Pues son ellas, “quienes tienen derecho a contar la historia de México desde sus imágenes, sus lenguas y sus territorios”, aseguró la secretaria.
En ese sentido, Payán reconoció a las creadoras que con “sus manos hábiles y miradas agudas han dado forma a estas historias. A través de sus linoleos y sus planchas han capturado la historia de nuestros pueblos, han denunciado injusticias, han celebrado tradiciones y han tejido de estampa a estampa la memoria visual de México”.
Bajo la curaduría de las gestoras culturales –especialistas en proyectos colaborativos y arte indígena– Mónica Villegas y Rosa Lidia Huaroco, así como del artista visual Demián Flores, la exposición responde a la necesidad de abordar la narrativa gráfica desde una perspectiva diversa, situada y conectada con algunas de las comunidades originarias de México.
Entre las 140 artistas, participaron en la exposición creadoras individuales y también integrantes del Laboratorio Gráfico Siete Vidas, las colectivas Mazatecas y Lxs Leñaterxs; así como artistas que colaboraron en procesos creativos comunitarios. Todas de pueblos originarios ubicados en la Ciudad de México, Chiapas, Durango, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Sonora, Veracruz y Yucatán.
En cuanto al proceso de gestión, los curadores realizaron una investigación y un mapeo a nivel nacional mediante los cuales identificaron a las artistas, seleccionaron obra existente, organizaron talleres de producción gráfica y comisionaron nuevas creaciones.
El resultado es una exposición que se compone de cuatro ejes temáticos: Usos y costumbres; Lucha y resistencia; Mitos y naturaleza, y Cuerpo y territorio, a través de los cuales las artistas comparten saberes que emergen de la memoria colectiva: los espacios que habitan y sus conceptualizaciones sobre el cuerpo, la naturaleza, la migración y la sexualidad.
“En estos trabajos ustedes pueden ver el papel tan importante de la mujer como depositaria de la tradición”, aseguró Domitila Molina Amarillos, maestra grabadora de la comunidad yaqui.
En cada pieza hay tradición artesanal y artística, pero sobre todo hay mensajes sobre la libertad, la familia, los roles de género, la relación con la naturaleza, la sexualidad y la búsqueda de justicia.
En ese sentido, Reyna Kimberly Sánchez Queriapa aseguró: “Este espacio es más que nada para visibilizar y para que la gente que quiera escuchar, escuche y aprenda. Es un espacio para nosotras mismas, para que entre todas, y la gente que quiera ver, reconocer y aprender, seamos un poco más conscientes sobre nosotras mismas, sobre nuestras propias realidades”.
En cuanto a técnica, explica el curador Demián Flores, se representó a la gráfica sobre papel y los procesos que trastocan otras disciplinas o amplían el campo gráfico hacia estrategias expandidas, como el bordado y la cerámica.
Así, el público recorre el MUNAE a la espera de encontrarse con técnicas tradicionales como aguafuerte, aguatinta, xilografía, grabado en linóleo y monotipo, además, de instalaciones, stencil, grabado monumental y otros lenguajes como el textil y la cerámica, que narran la identidad, las cosmovisiones, las tradiciones comunitarias y el vínculo con su entorno de las creadoras.
Grabadoras de Historias: mujeres en la gráfica de los pueblos de México se encuentra abierta hasta el mes de abril de 2026, en el Museo Nacional de la Estampa, ubicado avenida Hidalgo 39, colonia Guerrero en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
