* Legisladores y especialistas abordaron en seminario temas de migración, relación bilateral y seguridad regional
Ciudad de México.- Legisladores y especialistas abordaron los temas de migración, relación bilateral, Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y su renegociación y seguridad regional, durante el seminario “Relación México-EE.UU: viejos desafíos, nueva realidad” organizado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
En su intervención, el senador Benjamín Robles Montoya, condenó las redadas ilegales que efectúa el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, pues se trata de una operación de carácter racial, que no tiene nada que ver con la justicia ni la protección territorial.
El legislador del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (PT) denunció que en las redadas tratan con “una indignidad tremenda” a ciudadanos mexicanos y pretenden de manera contundente sembrar miedo y aminorar a nuestros connacionales en ese territorio.
Los mexicanos, apuntó, no podemos intentar ninguna diplomacia neutra ni pretendidamente elocuente, porque hay que ser directo en estas circunstancias; exigimos respeto y dignidad, subrayó Robles Montoya.
Por su parte, el académico perteneciente a Rice University, Tony Payan, dijo que no se debe esperar que la Unión Americana acepte llegar a un acuerdo en materia laboral y migratorio en las renegociaciones del TLCAN, pues no existen las condiciones políticas en ese país para ello.
Indicó que en el actual TLCAN, se encuentra un capítulo que habla de fuerza laboral de altas habilidades, el cual es realmente excepcional, pero que no se va ampliar, por lo que México debe esperar expulsiones masivas de millones de mexicanos y poco acceso al trabajo.
Payan dijo que EU considera al tema migratorio como un asunto doméstico, de ahí, que no esté abierto a negociar la migración con ningún otro país.
En el marco de este seminario, especialistas e investigadores destacaron como un elemento positivo que el Senado de la República sea acompañante en el proceso de modernización del TLCAN, porque en la estrategia de negociación los contrapesos son clave para avalar o no el resultado de este acuerdo.
Beatriz Leycegui, de SAI Consultores, señaló que es un momento crucial que, luego de 23 años, México tenga la oportunidad, en un contexto trilateral, de sentarse a negociar y hacer acuerdos formales con Estados Unidos, obligatorios bajo un documento legal.
La especialista señaló que en este momento el sector privado tiene que hacer sus propuestas y una revisión integral de cuáles son los principales obstáculos que existen en la relación con Estados Unidos y Canadá.
En su turno, Carlos Heredia, catedrático del CIDE, indicó que resulta “grave” que la voz de los trabajadores mexicanos se encuentre ausente durante la renegociación del TLCAN.
Los temas sensibles para México tienen que ver con la reducción de la ambición del tratado, ir para atrás en función de los acuerdos que hemos logrado, alertó.
Leycegui señaló que emprender una renegociación con el esquema mental de 1992 y “una falta de respeto a los derechos laborales”, es lo que ha provocado la ausencia del sector laboral. “Es fundamental incluirlo”.
También, participaron Jayesh Rathod, de American University; Raúl Hinojosa-Ojeda, de la UCLA; Emilio Kourí, de la University of Chicago; Luz María de la Mora y Carlos Heredia, del CIDE; Gustavo Vega, de El Colegio de México; Gustavo Mohar; Rafael Fernández de Castro; Pamela K. Starr; Olga Pellicer; Álvaro Santos; Raúl Benítez Manaut y Alberto Díaz-Cayeros.