* Para llegar a las encumbradas montañas de la Sierra Madre Occidental, uno de los destinos de la paraestatal, los choferes recorren 550 kilómetros por terrenos irregulares
Madera, Chihuahua.- La presencia de Diconsa en algunas zonas de Chihuahua es cuestión de supervivencia y uno de esos casos se encuentra en las encumbradas montañas que limitan con el estado de Sonora, señaló el gerente de la sucursal, José Trinidad Gómez Carrasco.
Ahí, desde hace 37 años, el almacén rural Madera abastece comestibles y artículos de aseo personal a ocho municipios aledaños donde se asientan 57 asentamientos tarahumaras y pimas, pueblos dedicados a la caza y a una limitada actividad pecuaria.
“Entre las montañas de la Sierra Madre Occidental, los choferes de la Sucursal Norte-Centro recorren hasta 550 kilómetros de terracería para transportar alrededor de 126 toneladas de alimentos por mes. El objetivo es abastecer las 100 tiendas comunitarias que permiten a las familias adquirir la canasta básica, al ser Diconsa su única opción de abasto”.
La labor de la distribuidora, sin embargo, se extiende a casi todo el territorio estatal, pues de los 67 municipios que conforman la entidad, la descentralizada ofrece suministro de productos básicos y artículos complementarios a 62 de ellos. Esto significa que 92 por ciento de tierras chihuahuenses, alrededor de 590 mil personas, cuentan con el apoyo de Diconsa a través de un almacén central y ocho rurales.
“En muchos de estos casos recorremos caminos de terracería muy accidentados y aunque son lugares muy bonitos por la existencia de pino y encino, también enfrentas peligros por la presencia de osos, lobos y coyotes que de repente se cruzan en el camino”, narra el chofer Raúl Campos, con 24 años de realizar esta labor en la sierra.
Entre las rutas más largas destacan las que conllevan a las localidades Nuevo Namiquipa y Mesa de la Simona, donde habitan 500 personas.
“Las nevadas de pronto complican el traslado de alimentos, pues las bajas temperaturas de menos 15 grados centígrados dificultan los accesos e incomunican poblados, sin embargo, el alimento nunca falta”, responde por su parte la auxiliar administrativa, Cristal Leyva.