* Condenamos enérgicamente a las autoridades penitenciarias del Estado de Puebla por este acto atroz
Ciudad de México.- Luego de lamentar los hechos y enviar condolencias a familiares de un bebé asesinado en el penal de San Miguel, ubicado en la ciudad de Puebla, la Asociación Civil Reinserta exhorta a las autoridades a investigar a fondo este acto y sancione al o los responsables de este asesinato, así como a la Fiscalía General del Estado de Puebla a actuar con plena transparencia y apego a la ley, sin dejar espacio a la impunidad.
Dicho penal es conocido por su autogobierno, tan sólo el pasado 6 de diciembre una persona privada de su libertad fue brutalmente asesinada y el 28 de diciembre se registró una riña entre internos.
Las autoridades están completamente rebasadas y son cómplices de los actos de corrupción que se viven al interior del penal, que van desde cobro de lista, el ingreso de mujeres sexo servidoras, la manufactura de droga y las peleas de perros para apuestas.
A los perros muertos, después de las peleas los sacan en bolsas de basura afuera del penal. Esta vez lo que se encontró en los botes de basura fue un bebé de tres meses que fue asesinado al interior del penal cuando ingresó en una visita familiar.
Desde Reinserta condenamos enérgicamente a las autoridades penitenciarias de Puebla, encabezadas por Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla; Jorge Gómez Torres, director del Centro y Alfredo Vargas Quintanilla, subsecretario de Centros Penitenciarios, por este terrible asesinato y por su incapacidad absoluta de mantener el control de un penal en el cual, pasó por desapercibido el asesinato de este bebé y que un interno del mismo penal, fue quien notificó sobre este hecho al encontrarlo en los contenedores de basura de ese penal.
Reprobamos la falta de implementación de los protocolos de ingreso y la falta de espacios seguros para que las niñas y niños que están directa o indirectamente en contacto con las cárceles puedan convivir con sus familiares de forma segura.
Los menores de edad están expuestos constantemente a la violencia derivada por el descuido de la autoridad al interior de los Centros Penitenciarios. Esta normalización de la violencia repercute y pone en peligro sus vidas.
Como Asociación Civil que trabaja por transformar la vida de niñas, niños y adolescentes marcados por la violencia, este asesinato nos conmueve profundamente pues, en ningún Centro Penitenciario del país debería repetirse estos actos inhumanos.